Different Love [En Edición]

Capítulo 6: Ian

Tommy
Las siguientes semanas fueron bastante... Predecibles.
Gracias al cielo Ian tenía vacaciones y pudo estar conmigo todo el tiempo. Literalmente TODO el tiempo, prácticamente no me dejaba sólo a excepción de cuando tenía que hacer mis necesidades básicas ¡Y eso sólo por que lo empujaba fuera del baño!

Hace tres días llegó una carta donde se me informaba que la Universidad me había borrado de su lista. ¡Genial! Ahora tengo que esperar otro año y volver a hacer un examen...

-¡Deja de mirar las partículas de polvo que respiras y ponte a limpiar! -Gritó y no pude evitar soltar una carcajada. En su cabello tenía un paño color azul y su cuerpo estaba protegido por un delantal rosa, claro, los guantes y la escoba no podían faltar. -¡Sí! Cuando tengas un problema médico seguro te dará mucha risa

-Perdón... Es que... -No podía parar de reír.

-Tommy... ¿Te sientes bien? Primero estas llorando como vil Magdalena, luego vomitas, todo te da asco, y ahora ¡Eres bipolar! -Me senté sobre la cama que ahora tenía sábanas limpias y nuevas. En realidad casi todo en el lugar era nuevo, ya que el polvo había arruinado la mayor parte de mi ropa y objetos. -¿Sabes? Creo que deberíamos ir al médico. Te acabas de poner pálido.

-Claro que no. Me siento bien... -Fingí una sonrisa. La verdad es que en ese momento la cabeza me daba vueltas e Ian tenía doble nariz.

-Pareces drogado. -Cerré los ojos y en un par de segundos pasó mi extraña sensación. Se lo atribuía inmediatamente a mis hábitos alimenticios, había estado demasiado ocupado limpiando, jugando "Last Of Us" y haciendo cualquier cosa que me distrajera como para preocuparme por comer sanamente. -¿Qué quieres hacer hoy?

-No lo sé. Estoy cansado.

-¿Quieres ver una película? -sonrió y se arrodilló frente a mí. -Anda, será divertido. -Con mis torpes dedos le quite el paño azul y acaricie su cabello. El cerró los ojos por un segundo y después me lanzó una mirada suplicante.

-Esta bien. Pero quiero chocolate, helado, pasteles, postres, sándwiches, helado de chocolate y Pay de Queso -Intenté aparentar que no le acariciaba el cabello de forma juguetona el hizo lo mismo.

-¿Y aparte un Pandicornio? -Se levantó un poco "enfadado" y me besó la frente.

-Con alas -Sonreí y me acosté mientras él salía de la habitación por todo lo que pedí.

- ... ¡Tommy! ¡Regresé! -Salté fuera de la cama, pero como Ian decía: El piso está enamorado de mí.
-Sí... Ya lo noté. -Me tendió la mano y la acepté.
-Traje "El Conjuro" y "Crepúsculo" ¿Cuál quieres? -levanté una ceja y le arrebaté la bolsa verificando su contenido.
-¡Oh... Mierda! ¿Crepúsculo? ¿Ahora que sigue? ¿Nos pintamos las uñas y arreglamos nuestro cabello? -Este rió quedo y me quitó la película de las manos.

-Es esto o escoges una de las que sobran en la bolsa.

-Créeme, nada es peor que ver un caso de maltrato intrafamiliar -Él frunció el ceño y preguntó que a que me refería. -¡Edward quiere comerse a su novia! Eso no es normal.

Hurgué en la bolsa y saqué la caja con la película "El Conjuro". Sinceramente odiaba lo referente al terror, quería dormir sin la sensación de que algo debajo de mi cama tomaría mi pie si por accidente lo sacaba.

-Para la próxima voy y yo escojo las peli... -me quedé callado cuando vi la portada de la tercer película. -¡¿BAD CAMP SEX?! ¡¿COMPRASTE UNA PORNO?! - Se la arrojé a la cabeza y él se cubrió con el antebrazo.

-Oye, no me puedes culpar. Todas las noches duermo a centímetros tuyo y no puedo tocarte. Necesito distracciones. -Lo miré receloso y fui caminando a la sala donde estaban las bolsas del supermercado con muchos empaques de dulces y frituras.

-¡Trajiste todo! ¡Gracias! -Corrí hasta donde él y me abrace de su cuello, me correspondió.

-Sí... Entonces... ¿Bad Camp Sex? -Alzó una ceja de manera "seductora" y me ruborice hasta el cuello.

-¡No! ¡No! El conjuro.

-¿Seguro? No puedes ver vídeos de Dross porque dejas de dormir y quieres ver El Conjuro -Entrecerré los ojos y puse la película sin más. Él me siguió y se sentó al lado de mí.

-I-Ian... ¿Le falta mucho? -Mis nervios habían sido destruidos y torturados y apenas comenzaba la parte "interesante". Sin darme cuanta hasta ahora, todo mi cuerpo estaba pegado al suyo.

-Cuando me digas la quitamos, aunque, por mi está bien si te aferras de esa forma a mi brazo. -Lo solté empujandolo, pero en una fuerte escena sólo me quedo volver a hacerlo y enterrar mi rostro en su cuello.
La luz ahora era muy escasa, las bombillas estaban apagada y el sol apenas y dejó rastros de su potencia. Así, lo que hizo a continuación le fue más fácil.

-Tranquilo, aquí estoy yo. -Susurró. Muy suavemente su mano acarició mi mejilla y la acomodó en parte de mi cuello haciendo cariñosas caricias. Me observó unos instantes y lo atrapé mirándome los labios, sonreí tímido cuando terminó con la distancia que nos separaba.

Mis mejillas se tornaron rosadas y le correspondí por primera vez uno de sus besos... Estando sobrio, claro.

Me acomodé para poder besarle aún mejor y él intentó hacerse paso con su lengua. Al principio no lo deje, así tal como estábamos lo disfrutaba, pero ante sus insistentes intentos se lo permití y ¡Wow! Me alegro de haberlo hecho.

Pronto y sin saber exactamente como sentí su peso sobre mí, el sillón contra mi espalda y algo más contra mi cadera. Abrí los ojos como platos y lo separé un poco.

-¿Qué pasa? ¿Te sientes bien? Luces algo.... -Me senté y el se quitó para darme espacio. Estaba asustado, confundido, herido y mareado. No, no estaba bien. - Enfermo.

Me levanté de un salto pero no sirvió para nada, la habitación empezó a dar vueltas a mi alrededor y la voz de Ian se escuchaba cada vez más lejana.

"Tommy ¿qué pasa? ¿Tomm? No..."

Fue lo último que escuché al hundirme en una obscuridad infinita.

-Joven, no se que paso. Seguro confundieron las muestras, por que de otra forma..., no veo como... -Las palabras de una voz masculina me despertaron parcialmente, aunque por más que intente no pude quedarme lucido.

-¡¿Cómo esta?! ¿Qué le paso? ¿Dónde esta Dereck? -Esa era la voz de mi hermana.
Reaccioné inmediatamente al nombre "Dereck" y me obligué a abrir mis ojos.
-¿Carlee?

-¡Bebé! -La habitación era completamente blanca y frente a mi estaban otras camillas, espere verme en bata, pero aún tenía mis jeans y mi suéter. -¿Qué paso? Ian me llamó para decirme que estaban en el hospital.

-¿Ian? ¿Dónde esta? -Me demoré varios segundos en acostumbrarme a la fuerte luz.

-Salió con el doctor, al parecer tenían Ian que hablar a solas. -Con todo y su enorme panza de embarazada me abrazó y repartió cortos besitos en todo mi rostro. -¿Dónde esta Dereck?

Con lágrimas en los ojos le conté absolutamente todo lo que había sucedido, sin omitir nada pide notar como su ira crecía.

-¡La próxima vez que lo vea lo voy a castrar al hijo de...! -Le puse la mano en la boca mientras terminaba de balbucear cuando insulto se le venía a la mente. Justo en eso entró el doctor,

-¿Cómo se siente, Tomm?
-Cansado, pero nada que no se arregle con dormir. -Este hombre maduro sonrió y miró a todos en la habitación deteniéndose en mí.

Ian estaba consternado, no pude saber por que, pero sus ojos miraban hacia abajo en forma triste y mordía sus uñas ansioso, incluso volteaba al techo de vez en cuando mostrando mucha preocupación. Esto me alteró.

-Do-Doctor... ¿Qué pasa? ¿Qué tengo? -A Ian se le formaron lágrimas en sus ojos y miré ansioso a Carlee, well a estaba igual que yo.

-Bueno, antes que nada, debes saber que repetimos cuatro veces el análisis y no hay duda de lo que te diré. No se como lo tomes... Pero debes estar tranquilo y pensar con la cabeza fría.

<Oh... No. Tengo cáncer> pensé.

-Bien pues, no se como es posible esto, pero ahí están las pruebas. Tommy... Está usted embarazado.