Capítulo 1. Dolores ocultos

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El empresario Gu Jun Pyo

Aunque mi vida ha cambiado mucho, cosa que le agradezco a Jan Di, quien además de ser la mujer que amo, es la única que ha logrado ver en mi algo bueno. Ahora soy un mejor hombre, por lo menos más humano. Pero en mi vida no todo es perfecto, cargo con la culpa de ser el hombre que le quito la mujer a su mejor amigo, aunque no es literal, pero debo ser consciente que la vida de él no es la misma. Ahora es solitario, dedicado a su trabajo, se alejó aún más de cualquier posibilidad de enamorarse.

Yo encontré el amor, el primero y espero sea el último. Pero no tengo tranquilidad, porque sé que él, aunque ya supero todo con Jan Di, no ha logrado encontrar a esa mujer. Todos dicen que yo soy un tonto que no se da cuenta de nada. Y quizás tengan razón, en mi mundo con tanto dinero, la responsabilidad de ser el CEO del grupo Shinhwa y el poder se puede caer fácilmente en la frivolidad, pero gracias al amor de Jan Di, trato de ser cada día mejor.

Es por eso que estoy organizando un plan para que mi amigo pueda relacionarse con otras mujeres a parte de Ga Eul, Jan Di y Jae Kyung. Así que le pedí el favor que le permitiera al grupo Shinhwa participar en una alianza con el Hospital Yoon para ayudar a grupos de personas que requieran tratamientos costos. Con esta idea, viene de lado que el grupo que trabajará con Ji Hoo serán varias mujeres de la sociedad que pueden ser un buen perfil para él. No digo que se case y tenga hijos de una vez, solo quizás que empiece a salir y distraerse. Pero como quiero que mi plan funcione, no hable con nadie de mis intenciones, ni siquiera Jan Di.

A ella, la última vez que intente decirle que todavía no podemos casarnos a pesar que la amo con toda el alma, se enojó mucho. Ella también comprende que la vida de Ji Hoo no es fácil, pero me dice que no debo sentir culpa, al fin y al cabo, ella gustaba de él antes que el descubriera sus sentimientos. Además, siempre me dice que su verdadero amor soy yo. Todo eso, es cierto, pero como olvidar que Ji Hoo siempre estuvo ahí para mí. Cuando yo más lo necesite. Por ahora, Jan Di también está terminando su carrera así que aún tenemos tiempo para casarnos.

El prestigioso médico Yoon Ji Hoo

Hable con mi abuelo de la idea que tiene Jun Pyo de generar una campaña para ayudar a las personas que tienen enfermedades de alto costo, con el apoyo del grupo Shinhwa vamos a poder brindar apoyo médico a esta población. Es por eso, que me dirijo a una reunión con él, para organizar algunos aspectos.

Al llegar me encuentro con el asistente de Jun Pyo, me da ingreso a la oficina y me sorprende de sobre manera que a esta reunión se citaron más personas, había imaginado que era algo personal. Saludo y hago una reverencia – Jun Pyo hace las presentaciones y puedo observar que, por primera vez, lo veo comprometido con un tema, al punto que pensó en todo. Cuando la reunión finaliza, no puedo dejar de felicitarlo, en verdad es una labor loable, debo iniciar con la visita a un centro de ayuda para niños con cáncer, ese será mi primer contacto, dado que siempre he pensado que los niños no deberían padecer este tipo de afectaciones. Una de mis razones de haber elegido oncología como especialización. Ahora me encuentro realizando estudios de pediatría oncológica.

La oscuridad de un Song Woo Bin.

Me enfrento constantemente a enemigos, pero ahora estoy luchando por mantener mi imperio, los jefes de las otras mafias con quienes había mantenido relaciones amistosas todo en nombre de los negocios, empezaban a sugerir que si el poder estaba en mí debía casarme. Ya se gestaban diversas opciones, pero yo he sido enfático no me casare obligado. Yo elegiré a mi princesa – claro esas palabras no eran más que un escudo para alejarme de esa obligación.

Nadie más que él conocía las implicaciones de estar casado, había vivido en carne propia el dolor. Su padre había amado con locura a su madre, fruto de ese amor, había nacido él – años más tarde los enemigos del clan – furiosos por las reglas establecidas, ¡Encontraron su debilidad – su madre!, ella se encontraba en sus últimos meses de embarazo cuando le hicieron un atentado en el  cuál tanto ella como la bebe que venía en camino murieron.

¡Tú, no tienes la culpa!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora