Capítulo 6

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10 de Febrero de 2021
Fabrica de Ferrari, Maranello, Italia.

Carlos llegó a la fábrica 15 minutos antes de lo solicitado, al caminar y dirigirse al salón donde realizaban las fotos vio que Patricia se encontraba preparando todo. Pero no había señal de Ángela en ningún lugar.

— Buenos días, creo que me adelanté — saludo Carlos con una sonrisa.

Patricia volteó hacia el y le devolvió la sonrisa, mientras continuo acomodando las cosas.

— Se porqué llegaste temprano — sonrío divertida — pero está ocupada, desde que llegamos esta en el teléfono. Ahora está hablando con la tía Sonia.

— ¿La tia Sonia? — preguntó confundido.

— Su mamá.

Asintió en respuesta, luego de un rato vio salir a Ángela de su oficina con el teléfono en la mano.

— Si, mañana hablamos, necesito hacer varias cosas — se detuvo a mirar a Carlos quien le sonrió un poco al verla — si mamá, prometo llamar más seguido, te amo.

Ángela frunció el ceño al verlo ahí tan temprano.

— ¿Te caíste de la cama? — preguntó mirándolo un poco divertida.

Carlos sonrió un poco más.

— Algo así, ¿me regalas unos minutos?

— Pato, ¿falta mucho? — preguntó mirando a su amiga.

— Me demoraré 20 minutos más — sonrió inocente.

Ángela suspiró y señaló con la cabeza su oficina, aceptando a platicar con el piloto. Carlos sonrió y camino hacia ahí, deteniéndose justo frente a ella, dejándola pasar primero. Ángela entró y se sentó en su gran silla, sonriendo. El piloto siguió con su mirada todos los movimientos de la chica.

— Siento que alguien me despertara en cualquier momento — confesó mientras giraba en la silla — la puerta tiene mi nombre, ¿lo viste?

Carlos río un poco y la vio con un poco de ternura.

— Te sienta bien todo esto.

— ¿El rojo es mi color? — preguntó divertida.

Al igual que Carlos llevaba una polo con el logo de Ferrari y ciertamente le quedaba genial. Y sus recuerdos viajaron a aquel vestido rojo de la última vez que la vio.

— Definitivamente — respondió mientras la recorría con la mirada.

Ángela carraspeó y volvió a ponerse en actitud seria.

— ¿Y bien?

— Quiero aclarar lo de hace dos años.

— Carlos...

— Tu me dijiste que si estábamos destinados, nos reencontraríamos — Ángela lo miro asombrada, no creyó que se acordara — se que tienes novio, pero quiero que sepas que también me tienes a mi.

— ¿A ti? — susurró con un hilo de voz.

— Como lo que necesites... — Carlos caminaba hacia ella en lo que decía todo eso — de la forma que me pidas, estaré a tu lado.

— No se que decirte, yo...

Justo en ese momento una llamada de Julio entró al celular de Ángela, Carlos al ver quien era la miro con la esperanza que no atendiera. Ella por su parte, no sabía que hacer, suspiró y tomó su celular, se lo quedó viendo unos segundos.

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