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El corazón de Lisa se paró por un segundo. ¿Que acababa de hacer? Ahora si que la había cagado.

- Lisa yo...

Lisa no quería escuchar, ya sabía claramente lo que iba a decir, no necesitaba escuchar más, intento safarse del agarre de Jennie,y lo logro, pero justo cuando estaba por abrir la puerta del baño, esta misma la había agarrado fuertemente de la mano.

-Escúchame...

-No, ya se lo que vas a decir

- No lo sabes.

Lisa abrió los ojos de par en par, y sintió como un escalofrío recorría todo su cuerpo.

- Lisa, mira. Eres una chica super dulce y te tengo muchísimo cariño, pero ya tengo pareja, y necesito que lo entiendas. Vamos a seguir siendo amigas y esto no nos va a distanciar, y ojalá nunca nos distaciemos, enserió te quiero mucho, pero creo no tengo los mismos gustos, ya sabes, me gustan los chicos...

- Si... lo se.

Y si, era exactamente lo que Lisa pensó que le diría. Y pues claro ¿que más podía hacer? Si no le correspondía, no tenía nada más que hacer.

Luego de eso, Lisa intento olvidar todo al igual que Jennie, quedaron como amigas y debes en cuando se juntaban a charlar por las tardes o a veces iban a cenar algo a algún restaurante casual.

Y Jennie si lo sentía raro, nunca una chica había gustado de ella, o por lo menos ninguna se lo había dicho, no la ponía incomoda ni le desagradaba, pero era algo que nunca había sentido, porque le contaba cosas sobre ella, sobre su relación, sobre su familia.

Sin duda eran buenas amigas, pero la prioridad de Jennie siempre fueron Jisoo y Nayeon, y la de Lisa siempre fue Rosé.

A Nayeon nunca le agrado Lisa y viceversa, pero nunca pasó de eso, hasta que un día todo cambió.

¿Lo que cambió todo? Una persona, y su nombre era Minnie

Nos Encontramos/ JenlisaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora