(...)
- Poseidón, más despacio. - Pidió la pelirroja mientras bajaba las escaleras. - ¿Qué quieres mostrarme? -
- ya lo veras. - le extendió su mano a la diosa para ayudarla, la acepto.
Ambos dioses siguieron caminando por unos segundos más, Sigrid no había visto esa parte del palacio, estaba muy oscuro, la única iluminación que había era de los pequeños rayos del sol que se colaban por las cortinas de terciopelo color azul pavo.
- llegamos. - anuncio el rubio, Sigrid ladeo la cabeza confundía. - mira. - dicho eso, abrió una de las cortinas.
Sigrid achino un poco los ojos por la luz recibida, pero al acostumbrarse, abrió los ojos asombrada, frente a ella había un enorme jardín, que, aunque estaba un como descuidado, seguía siendo hermoso, miro al rubio, el cual solo le hizo un movimiento de cabeza indicando que prosiguiera.
sin esperara mas esta paso al jardín, fuentes, arcos... sin duda era hermoso, y con un poco de trabajo lo seria mas.
- ¿te gusta? - pregunto Poseidón, la pelirroja solo asintió admirando todo el lugar. - es para ti. - confeso y Sigrid lo miro asombrada. - esta parte del castillo solo es ocupada por el jardín, hace mucho tiempo que nadie le hecha una mano. -
- ¿Cómo sabias...? -
- ese jardín de Asgard no se hizo solo, además, Hades ya me lo había mencionado. -
- yo... no que decir...Gracias. -
En gran parte si. Su hermano le había dicho unas cien veces que a la pelirroja le gustaba la jardinería, pero también la había visto en el otro jardín del palacio.
- ¿y esa pared? - pregunto la pelirroja, viendo una pared que claramente se había instalado después.
- conecta con el jardín principal. - contesto el rubio. - ¿quieres que mande a derrumbarla? - pregunto.
- si, no creo que sea necesario seguir ocultando este hermoso jardín. -
sin duda, le encantaba verla sonreír.
(...)
Era un día aburrido, no sabía qué hacer y estaba desesperada, suspiro y se levantó de su cama pensando que hacer, podía ir a Asgard a ver a sus hermanos, o podía ir al inframundo a ver a Hades, pero no tenía ganas de ninguno de los dos.
Salió de su habitación y fue al jardín para intentar entretenerse con algo, miraba a sus alrededores, pero nada requería de algún arreglo o algo por el estilo, y tampoco habían almas, bufo con frustración.
- Que aburrido. –
Poseidón se encontraba en la biblioteca sosteniendo una carta enviada por su hermano Zeus, al terminar de leerla la arrugó y tiro, hace semanas su hermano le había pedido hablar con él, pero este simplemente no le hacía caso, y mucho menos ahora que su esposa estaba a nada de terminar su segundo trimestre.
Se levanto de su asiento y se dispuso a irse, mientras caminaba por uno de los pasillos, miro por uno de los ventanales que daba vista al jardín y ahí vio a su esposa, caminado mientras acariciaba su vientre, se notaba que estaba aburrida. Frunció el ceño pensativo mientras miraba a la Nórdica, cuando se le ocurrió una pequeña idea.
Sigrid cansada, se dirigió a la fuente que estaba en el Jardín, y se sentó en la Oria de esta, todavía sosteniendo su abultada barriga, estaba a solo un día de pasar al tercer trimestre, aunque en lo que a ella respecta, sentía que ya estaba ahí.
Sintió como su bebé se movió y sonrió con calma ante esa acción.
- Vas a tener que esperar a que me recupere. – dijo dando caricias – yo soy la que te está cargando, y déjame decirte que estas algo pesado. - no lo negaría, estaba demasiado nerviosa, no sabía como seria de madre, y le asustaba, pero estaba segura de que daría su mayor esfuerzo.
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Una Historia No Contada
РазноеPara ella, él era despreciable. para él, ella era patética. pero... ¿Quién hubiera dicho que un pequeño error cambiaria eso? ______________ la historia no es fiel a la mitología Griega ni Nórdica. los personajes pertenecen a Takumi Fukui y Shinya...