"¡Jungkook! ¡Jungkook detente!"
El omega ignoró los constantes llamados del alfa y de Yoonah. A paso rápido caminaba en dirección al carro que había dejado estacionado unos metros más abajo de la pequeña colina donde se encontraba la cabaña del demonio.
Constantemente limpiaba las escurridizas lágrimas que caían sin control por sus ojos, estas a su vez nublando desagradablemente su visión.
¿Cómo era posible esto? ¿Su padre todo este tiempo estuvo en Fuego? ¿Por qué nunca lo buscó? Se había separado de su madre, pero no de él ¿Y qué papel jugaba Yoonah en todo esto?
De pronto, mil escenarios creándose en su cabeza. Todos peor que el anterior.
Como pudo ingresó al carro, bufando cuando sus manos temblorosas le impedían poner las llaves para hacer contacto.
Para su malestar no alcanzó a encenderlo, dándole espacio a que su padre abriera la puerta del coche, impidiendo así que este se marchara.
"Tenemos que hablar" le dijo firme, apoyando una de sus manos en el volante del carro. Jungkook gruñendo lo miró con ganas de golpearlo nuevamente al ver que este tenía casi la mitad de su cuerpo dentro del carro.
"No tengo nada que hablar contigo, sal del carro o te juro que la atropello"
El alfa lo miró durante unos segundos y cuando notó al menor distraído, rápidamente le arrebató las llaves del carro y salió de este.
"Baja" dijo guardando las llaves en uno de los bolsillos de su pantalón "Tenemos que hablar"
Y Lee Sungho no conocía a su propio hijo, porque no se esperó que este de un momento a otro se bajara del carro con el rostro como si de este emanaran llamas de fuego y con sus ojos con su fuerte dualidad entre el azul y el rojo para de un solo empujón en su pecho lanzarlo lejos de él, como si este fuera peor que plaga.
"¡¿Quién mierda te crees que eres?!" gritó el omega, ignorando las peticiones de Yoonah.
Por el momento solo escuchaba pequeños susurros, su razón siendo completamente nublada por constantes imágenes, desde su madre llorando por el abandono de su padre, las burlas en el colegio cuando lo trataban de niño abandonado y no querido, su abuelo tratando de darle consuelo cuando era su cumpleaños y este se aferraba a la puerta de la entrada de la casa, esperando que su padre ingresara por esta solo para desear un feliz cumpleaños.
Es que nunca lo entendió. Nunca pudo comprender cómo su padre fue capaz de abandonarlos, a su madre y a él. De mayor siempre dijo que le reprocharía de su abandono, porque él podía entender que un matrimonio se terminara, pero de ahí a cortar la relación con su hijo... Eso no lo podía perdonar.
Y quizás en lo más profundo de su ser, su aversión al compromiso, esas ganas de usar y desechar a los alfas era solo para romper con la imagen y vengarse del alfa que lo rompió primero.
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Agua & Fuego | Taekook | Omegaverse ³
FanfictionLuego de una guerra por el poder, los clanes se independizaron. Al norte, los Kim se quedaron con las Tierras del Agua, formando alianza con los Jung que poblaron las Tierras del Aire. El indómito sur lo gobernaron los Jeon, quedándose con la Tierra...