Capítulo 14

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6 de mayo de 2021.
Barcelona, España.

Samantha y Patricia escuchaban atentamente lo que Ángela les estaba contando, claro que, sin entrar en detalle de todo lo que sucedió cuando ambos terminaron en la cama del piloto. Desde luego que Sam fue la que chillo más emocionada.

— Todo muy lindo pero... — alzaba y bajaba las cejas rápidamente — ¿Que tal es en la cama?

Ángela sonrío agachando la mirada.

— No te voy a decir eso, Samantha.

Patricia carcajeó.

— O sea que fue bueno, de otra forma nos hubieras dicho algo más.

Ángela se puso de pie y empezó a caminar hacia su habitación, les quedaba dos horas para ir a la comida en casa de los padres de Carlos.

— Dense prisa, no quiero llegar tarde.

— Por supuesto, la suegra no se puede llevar mala impresión de ti — bromeó Samantha caminando hacia el cuarto de visitas para empezar a arreglarse.

— Me da gusto que la pasaras muy bien, cariño — dijo Patricia abrazándola.

Las tres se apresuraron en arreglarse, Ángela estaba indecisa sobre la ropa que se pondría. Habia calor, por lo que optó que un vestido sería la mejor opción, había comprado un vestido floreado que no había tenido la oportunidad de estrenarse, por lo que eso se pondría junto a sus flats blancos. Samantha y Patricia optaron por short y una polo junto a sus sandalias. Cuando estuvieron listas pidieron un Uber para llegar.

— ¿No han pensado en aprender a conducir? — preguntó Samantha mirando a sus dos amigas.

De las tres, las únicas que conducían eran Ángela y Samantha, el único detalle con Angie era que se estrenaba cuando estaba detrás del volante y no avanzaba mucho, por lo que no conducía. Mientras que Samantha aprendió por necesidad, tanto en Yucatán cómo en Cancún las distancias eran grandes y no le quedó de otra.

— No gracias — respondió Patricia riendo.

— Estamos bien así.

Samantha rodó los ojos divertida. El auto se demoró más de lo que esperaban y ya iban una hora regresadas, las chicas miraban divertidas a Ángela que parecía ansiosa porque el auto llegara. Una vez que el auto llego, le dieron rápido la dirección de casa de los Sainz en Barcelona.

Al llegar las tres quedaron impresionadas era una casa enorme, habían varios autos estacionados, bajaron rápidamente del auto y caminaron a la entrada para tocar el timbre para entrar. Cuando la puerta se abrió, dejó ver a Reyes, quien sonrió en cuanto vio que era Ángela.

— Cariño, pensé que te había pasado algo, iba a mandar a Carlos por ti — dijo saludándola con un abrazo — está ansioso porque no venías...

— Lamentamos mucho la tardanza, Reyes, el Uber se retrasó — se disculpó la mexicana correspondiendo al saludo — ellas son Patricia y Samantha.

— Un gustó, lindas — las abrazo a ambas — todos están en el jardín trasero, Mattia no podrá venir...

— Si, nos aviso que tuvo un problema y nos vería hasta el sábado.

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