Através de lo que suelo llamar hogar
Se huele la sangre, sudor y cemento
El peligro de estar mañana muerto
Un hecho al que me he sabido acostumbrarAdicción,es olida como espesa niebla
En estos fríos e infames valles
Donde la traición vive y la maldad puebla
Como carros rodando por las callesNidos vacíos e infancias arruinadas
Con la pobreza tumbada en el medio
Y como un afligido espectador mas
Exhala otro cigarrillo como si se tratara remedioPersonas tatuadas de cicatrices
Lagrimas llenas de ceguedad
Personas perforadas por las raices
De esta vanidosa sociedadEsta cruda existencia y extinción
Suele ser llamada por otros "infierno"
Ellos intentan cambiar mi situación
Siempre intentan iluminar mi rincón
Sin saber a que me aferro,
Y esto es al dulce néctar del veneno.