Maira se pudo observar las miradas de Leonardo y noto incomodidad, acaso no encontraba en los ojos de él paz en los suyos, pero, podía encontrar comodidad en los de Máximo.
—Quiero hacer pis —Dijo Máximo.
—Yo también contesto —Maira
Todos se giraron y la miraron desacostumbrados. Maira podía hacer pis, pero era nada más unas gotas, ya que si no sus cables serian dañados, Máximo y Maira, bajaron del coche, cerrar la puerta y se adentraron al bosque, Maira se pensó como puedo hacer pis, porque es tan complicado.
—Máximo-Chillo ella.
Máximo se acercó adónde ella estaba, puso sus manos en sus bolsillos y se le quede mirando.
— qué esperas que haga, ¿no esperars a que baje tu ropa interior?
— cómo se hace pis en el campo, dijo Maira sin poder conectarse a la red.
— No jodas Maira, no sabes hacer pis en un bosque.
—No.
—Agáchate y dobla las piernas y ábrelas para no mojarte los pies - Máximo, se agachó para enseñarle.
—Que hago con esto —Dijo Maira con las bragas en la mano.
—No tenías que quitarlas, solo ... Déjalo.
—No, entonces que hago.
—Haz lo que tenga que hacer.
—Pero no puedo hacerlo si tú me miras.
—Me estás... Claro Maira.
—Y pensar que yo se las quitaba y ahora sujeto, bragas.
—Ya, acabe —Dijo Maira colocándose la falda.
Se subieron al coche y continuaron el viaje, después de un rato, aparcaron. Las chicas bajaron primero.
—Toma —Maira oyó la voz firme y aguda de Máximo.
—Se giró y lo miro a los ojos.
Máximo abrió su mano, dándole, las bragas.
—Te olvidaste de colocarlas.
Maira se quedó boqui abierto.
—Que llevas ahí-Comentaron las chicas.
—Ee nada.
— No jodas, sé que mientes porque ríes.
—Yo, no-Miento.
Cristal, intentó hacerle cosquillas a Maira, pero Maira se quedó rígida
—Vale, me riNdo,. La chica se alejaron.
—Maira se quedó patidifusa, Cuando vio máximo liarse con una.
—Eres un capullo —Fue lo último que dijo, antes de entrar a recepción.
Máximo no sabía, de dónde venía ese comentario y se quedó un poco confundido.
La chica que entro recepción, salió por el bosque. Entonces sintió una mano estirar de su brazo y ella se giró, encontrándose a Abril.
—A dónde ibas-Dijo abril con una sonrisa.
—Supongo que a despejarme.
—No sabía que tenías tantos problemas.
—Solo unos pocos.
—¿Te puedo pedir un favor?
—Supongo, que sí.
—Esta noche quedé con un chico, y ya sabes lo que voy y quería saber si me dejarías la habitación sola —Sugirió la chica de pelo rizado.
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Eléctricamente enamorada
Ciencia Ficción¿Como se sentiría infiltrarse en un mundo ajeno sin normas ocultando su identidad? Bros es mecánico muy prestigioso en Viena, lo que nadie sospecha es lo que oculta cuando baja la ventana de su piso. Allí crea a 512, un androide con características...