Es curioso saber que lo imposible puede ser posible. Yo no creía en varias cosas como la reencarnación, era algo ilógico y estúpido, pero bueno, cada quien tiene sus creencias. Sinceramente nunca pensé renacer en un mundo como lo es Kimetsu no Yaiba...
Me sorprende un poco saber que no me morí en la selección final, bueno, pensé que sería más difícil, pero fue muy fácil. Todo el entrenamiento de mis diferentes maestros me sirvió en todo momento, incluso lo más básico me sirvió para sobrevivir.
Ahora solo me dirijo hacia la finca de Uzui para descansar, toda mi energía se fue en la selección final por usar la respiración lunar. Ya casi domino esa técnica de respiración, solo que no es mi fuerte la resistencia para generar las sierras lunares.
-(Ya mero llegó)- pensó Haruka con una leve sonrisa. La finca de Uzui se encontraba cerca de un pueblo, y de un bosque -¡Ya llegué!-
-¿Haruka?- Hinatsuru apareció en la entrada de la finca.
-Hola, pensaba que no estaban en la finca- Haruka noto que Hinatsuru se encontraba haciendo la comida -Y el viejo se fue a una misión ¿No?-
-Si, Tengen-sama se fue a una misión y las demás están en el pueblo eligiendo los vegetales para la comida- diría con una sonrisa Hinatsuru.
-¿Quieres que te ayude?- pregunto con un tono amable Haruka.
-No, ve a descansar- Hinatsuru volvió a meterse a la finca junto a Haruka.
Mi relación con cada esposa de Uzui es diferente, con Hinatsuru y Makio me llevo bien, pero con Suma no me llevo muy bien que digamos, los dos siempre discutimos por tonterías.
-¿Que haré con esto?- Haruka miraba su marca de cazador en un espejo.
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La marca de cazador me ha causado varios problemas, ciertamente es un beneficio para el cazador, pero estar todo el día con el corazón acelerado por la marca y estar constantemente con fiebre cuando utilizo de más a la danza del dios de fuego, hace que me incomode usarla. Es similar cuando uso el mundo transparente por largo tiempo, un fastidio la verdad.
-Tendré que hacer lo mismo que hice hace años. Sellar la marca hasta el día que llegue una emergencia- Haruka se miro por última vez la marca antes de cambiarse de ropa para entrenar.
15 días después
Pasaron dos semanas y un día para que mi herrero llegará a la finca de Uzui. Quería matar demonios, pero tenía que esperar mis otras armas.
-Ahí viene- Haruka miro a lo lejos a un tipo con una caja en la espalda.
Afortunadamente Haganezuka no era mi herrero, si no un viejito que era el herrero de Tokito. Me indico cómo es y como se elabora una nichirin, y me amenazó en no romper su arma.
-(Ya se cuál será el resultado)- pensó Haruka mientras veía la nichirin en una caja.
-Ya saca eso- dijo Uzui enojado ya que Haruka solo miraba la nichirin.
