Me di cuenta de que hace mucho no les subía un relato sad, así que aquí va uno.
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- Oye, me preocupas... - Le decía su ex viéndola un poco más cambiada. Venía a buscar a los niños para pasar tiempo con ellos. - No te veo muy bien.
- No es nada. - Le dijo ella sonriendo aunque no le nacía hacerlo, se sentía terriblemente mal. - He estado cansada con la última novela, apenas y tenía tiempo para descansar... Gracias por preocuparte.
- Bueno, ahora ya tendrás más tiempo. - Comentó el hombre tranquilo. - Cuídate Lucerito, sabes que a pesar de que ya no estemos juntos aún te aprecio, y te guardo afecto.
- Muchas gracias, sabes que el sentimento es recíproco. - Ella sonrió y lo palmeó por la espalda. - Estaré bien.
- Nos vemos.. - Él salió, tendría el fin de semana con los chicos, ellos le esperaban en el auto.
Ella lo despidió con la mano, y luego cerró la puerta. Ahora si tendría tiempo para llorar, no había querido hacerlo frente a sus hijos, y menos frente a su ex esposo.
Hace un mes había acabado la filmación de "Soy tu dueña", y no lo había vuelto a ver más, él tampoco se esforzaba por buscarla. ¿Por qué a esas alturas de la vida se había ilusionado tanto? E incluso echó su matrimonio por la borda por aquella ilusión, aunque bueno, ni su ex ni ella se amaban ya, y habían también otros motivos de por medio para hacer efectiva la ruptura. Ahora estaban mejor de amigos.
Manuel estaba tranquilo, feliz, en una nueva relación, y ella... Ella no. Ella extrañaba a un hombre que le había dicho muchas cosas estando "Enamorado" y que ahora se había esfumado con el viento. No sabía de él, y con seguridad él tampoco sabía de ella, no sabía lo mal que la pasaba, lo mucho que lo extrañaba, y todo lo que le dolía que él se hubiera ido sin decirle absolutamente nada. Sus ojos derramaron lágrimas, y así se vio al espejo. En efecto, no lucía muy bien, su mirada brillante ahora estaba muy apagada y se sentía sin ánimos de nada.
Porque él le había robado su luz.
Quería buscarlo, llamarlo, y pedirle que le regresara a la Lucero sonriente que él se había llevado, que había disfrutado, amado, y vivido. Era un sin vergüenza, un rompecorazones, un soltero sin remedio que se le había llevado el alma.
Pero lo iba a superar.
Sí, estaba recién divorciada, pero estaba sufriendo por otro. Reverenda ironía.
Vinieron más meses, y su corazón estaba mucho más aliviado, creía olvidarlo poco a poco, y aunque su desdén, y la cero comunicación de él con ella podía ser un arma letal, sólo le ayudó a irlo olvidando. Se olvidó de su tórrido romance, se olvidó de cuantos "Te amo" le había soltado a la ligera pensando que él sentía lo mismo, de las infinitas veces que se habían amado, que él con aquella sonrisa bella y vacilante le decía lo importante que era para él. Todo parecía haber sido un sueño sólo de ella, porque Fernando había desaparecido de su vida como si ella jamás hubiese existido para él.
Ignoraría todo eso, y guardaría sus recuerdos con él en algún rincón de su mente. Y sería su amigo, sería el colega que más quiso, su compañero adorado, quien la apoyó en su momento más débil emocionalmente, sería un hombre especial para ella...
Pero jamás sería quien le rompió el corazón y se había largado para siempre.
Lucero encendió la televisión un rato, y la estabilidad que había forjado por meses se cayó como un castillo de Naipes.
"¡Las imágenes lo confirman! El actor Fernando Colunga se ha dejado ver muy bien acompañado de nada más y nada menos que la actriz Blanca Soto, y es que este galán de telenovelas como sabemos, siempre ha sido muy reservado en cuanto a su vida privada. Pero las fotos con la también famosa actriz nos deja ver que la naciente relación va muy enserio, a ambos se les ve muy felices y contentos."
Ella se quedó sin reacción alguna, y no pudo evitar que las lágrimas se agolparan en sus ojos. Se llevó las manos a la cabeza y negó mientras las lágrimas corrían sin cesar.
- Que tonta...
Apagó el televisor y se acurrucó en la cama a llorar todo lo que durante meses creyó superado, pero ahora si lo dejaría salir todo de una vez y definitivamente de su corazón. Él había actuado como un cobarde, pensó, y le recriminó el nunca haberle dicho que jamás sintió nada por ella.
Tal vez ahora si estaría enamorado, tal vez con esa mujer si querría estar, tal vez ella si le importaba. Eso sólo el tiempo lo diría.
Pero ahora, en medio de las lágrimas y el dolor en su pecho. Supo que a partir de mañana lo dejaría ir, y dejaría de sufrir en silencio.
Y nadie jamás tendría porqué enterarse que aquel amigo, colega, y amante al que tanto quiso. La hizo vivir la ruptura más dolorosa de su vida.
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The other woman suena en el fondo.
Yaa, ahora si ya no las pongo a sufrir más. Es que estos capis ya los tengo escritos así que ni modo. 😘
Después de este sí viene la segunda parte de "Víbora". Hasta luego, beban agua.
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Lucero y Fernando [Relatos]
FanfictionRelatos y One shots LC / Lucero y Fernando Colunga.