El Dragón Maldito

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Corazón de piedra y escamas,
Cenizas que deja en sus pasos,
Inflamable aliento de ira,
Peligrosa sus garras y su mirada.
En su leyenda dice que vivía cerca del dolor para alimentarse de él,
Consumía a quien la amaba,
Respiraba las palabras de los mortales para así desgarrarle sus pensamientos,
Dejándolos atónitos con su imponente presencia.
Asustaba su alma maldita...

-¿Y que fue de ese dragón abuela?
-No era un dragón, era una princesa- dijo la anciana con intriga a su nieto.
- ¿Por qué se alimentaba de las personas e iba hacia el dolor? ¿No queria ser feliz?
- La princesa nunca supo como serlo y murió de ello.
- ¿Se puede morir por estar triste?
- Si, triste, adolorido por dentro, son las peores muertes, atraen y se crean las enfermedades más letales.

Florecer ante la AdversidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora