The Glimpse of us

One of us.

La relación entre Carlos y Victoria había tenido momentos tan felices que ambos se sentían soñados, Victoria se había mudado a Holmes Chappell, estaba mas cerca de el y eso era lo mas importante.

Carlos buscaba cualquier excusa para irla a ver, la familia de Carlos la había conocido días atrás y les había parecido una chica ordinaria, sin más, no estaban felices pero tampoco decepcionados, solo esperaban que eso no durara para siempre.

Carlos estaba tratando de dar lo mejor de sí para que Victoria se diera cuenta de que el valía la pena, la relación no había formalizado, porque para Carlos ya estaba en una, mientras que para Victoria el futuro se veía incierto al lado de Carlos.

Había conocido a su familia, devota católica española, clasista y rica, algo que ella no encajaba, Carlos le habría dicho que eso no influía en nada pero ella sabía en el fondo que si; se sentía atraída hacia el no lo dudaba, el sexo era fantástico, era detallista y era absolutamente Perfecto, pero si había algo que molestaba a Victoria era la obsesión de Carlos de querer empezar a controlar la vida de ella.

Carlos la miraba tan frágil e indefensa que le molestaba la idea de que ella se quedara sola, que no estuviera a su lado y eso empezaba a provocar fuertes discusiones entre ambos, Carlos se empeñaba a que ella pasara todos los fines de semana en España con el o si había una carrera era casi obligatorio que ella tenía que acompañarlo.

Por su parte a Carlos, le cagaba en las pelotas que ella no hablara abiertamente de su relación mientras que el seguía respetando esa decisión, le costaba trabajo entender que si había premios / alfombras rojas el asistiría solo ya que a Victoria no le llamaba la atención.

La presión en el trabajo de Victoria aumentó con su cambio de puesto, su familia en Mexico presionándola a volver a verlos y Carlos presionando por su lado por querer conocer a su familia, eso estaba cobrando factura y era demasiado cara.

Carlos y Victoria tenían buenas intenciones, se están empezando a amar, pero la falta de comunicación hacía que los pleitos fueran más y más.

Era víspera de navidad, la familia de Victoria había llegado a Inglaterra, sus padres, su hermano y su familia y un par de tíos y primos habían hecho el sacrifico de irle a ver, Carlos quería provocar una buena impresión estaba nervioso que le sudaban las manos.

La casa olía a un aroma peculiar, tamales, buñuelos, frijoles refritos, salsas, postres, todo se cocinaba en la casa de Victoria, gente entrando y saliendo, tomándose fotos con la nieve que caía, Victoria había estado Yam ocupada que no había podido ni siquiera tomar el celular para ver qué tenía más de 59 llamadas perdidas de Carlos y varios mensajes.

La noche ya estaba por caer, la familia de Victoria se estaba arreglando, su padre estaba en la sala acomodando los regalos cuando el timbre sonó y se acercó a abrir al ver a Carlos en la puerta de la casa, con una caja llena de distintos quesos y jamones españoles.

Se presentó con su padre, dándole la mano, enseguida bajo toda la familia que estaba en la casa de Victoria, se fueron presentando uno por uno con ella, la casa de Victoria se miraba diferente, se sentía diferente y eso le gustaba.

La calidez que derramaba la familia de Victoria lo hacía sentir como en casa o mejor aún como en familia, Victoria empezó a servir los distintos platillos en la mesa principal y por un momento Carlos, se imaginó una familia con ella, siendo parte de estos momentos y eso le daba un sentimiento de querer soltar unas lagrimas, porque no había podido ver más allá, Victoria sería una excelente madre y esposa.

Joder, claro que lo sería, Carlos la miraba con entusiasmo, era lo que siempre buscaba y lo tenía y no quería dejarlo ir.

Trato de guardar cada recuerdo de esa cena, recordando olores, colores, la imagen de Victoria sonriendo con su familia.