Amor Por Celular (Carre Y Quackity)

La llamada

_Carre te extraño_ Dijo Alexis, estaban jugando junto a Juan, Rodri no pudo evitar sonreír.
_ Yo también te extraño_ Musitó, intentando que el chat no notara su nerviosismo.
_Mandame una foto de tu pi...
Bueno, revoleo los ojos e ignoró sus palabras, luego hablarían de eso, Alex era un chico bastante atrevido pero extrañamente también era muy tímido, recordó cuando lo vio por primera vez en España, su sonrisa enorme y brillante, sus ojitos achinandose generándole una sensación familiar y cálida, siempre supo que se iban a llevar bien, cada vez que lo veía en stream pensaba "Ese chico va a ser mi amigo" y tenía razón, rápidamente se hicieron cercanos, tenían un humor parecido y una forma de relacionarse compatible. Pero no se esperaba que el giro argumental de su historia tomara ese rumbo.
La primera vez que se quedaron solos, Ivan había salido a hacer unas cosas y ambos se quedaron sentados en la cama, charlando de estupideces, entre risitas y bromas, Alex acarició su mano, quizás fue una interacción pequeña, pero la electricidad que recorrió su cuerpo fue muy grande en comparación. Los días siguientes los toques imprevistos se hicieron presentes, de una forma constante y buscada, incluso una noche Ivan le preguntó_ ¿Qué onda con Alexis bro?
_ Nada ¿Por qué preguntas?_ Susurró. El peli negro sonrió y levantó una ceja_ ¿Qué?
_Daaale, te conozco_ Insistió, Rodri sintió sus mejillas enrojecerse.
_ Es bonito...
Bonito, eso pensaba Alexis de él, lo veía sonreír y agrandar sus ojos verdes, sintiendo como su corazón palpitaba con fuerza. Le gustaba estar cerca de el, abrazarlo, tomarle la mano, besarle las mejillas, incluso comenzó a preguntarse cómo se sentiría besar sus labios pero rápidamente intentó quitarse esa idea de la cabeza, recién se conocían y no quería poner las cosas incómodas, aparte Rodrigo había sido claro con su orientación sexual, probablemente no sentía atracción hacia él y en el caso de que dudara de su orientación, probablemente tendría algo con Ivan o quizás se sentiría atraído hacia axozer, que también pasaba mucho tiempo con el últimamente, pero estaba seguro de que los deseos que el tenía eran unilaterales, aunque a veces dudaba, cuando se quedaban un par de segundos de más mirándose a los ojos, o cuando el oji verde se acercaba de más fingiendo estar a punto de darle un beso, pensaba, quizas... siente lo mismo que yo.
Pero una noche, unos días después de la velada del año, hicieron una fiesta en la casa de Ibai, la cual era conocida por ser muy grande, podría decirse que este dato era importante, ya que ambos se perdieron intentando buscar algo que les habían pedido y aprovecharon el estado alcohólico en el que se encontraban para asincerarse un poco. Rodri lo miró, sentado en el suelo buscando el número de alguno de los pibes para que los ayudaran a saber dónde estaban y se acercó a él.
_ No los llames_ Susurró. Alexis lo miró confundido, mientras recorría con sus ojos esos labios rojos y carnosos que tenía peligrosamente cerca.
_ ¿Por... que?_ Dijo casi sin aire, mientras el oji verde esbozaba una pequeña sonrisa traviesa y acercaba su mano para acariciar su rostro con la llama de sus dedos_ Carre...
_Me gusta como suena mi nombre con tu voz_ Musitó y apoyó su nariz en la del otro, las respiraciones entremezclandose. Alexis se rió, nervioso_ También me gusta tu risa.
_ A mi me gustas vos_ Soltó, sorprendido de sí mismo e intento correr la mirada, pero Rodri no lo dejó, tomó su rostro con ambas manos y lo besó, al principio fue un beso tímido, preocupado, pero cuando Alex correspondió, abriendo su boca, la lengua del oji verde comenzó a danzar dentro de ella, desesperado y ansioso, no sabía cuanto necesitaba esto, cuanto lo necesitaba a él y de cierta forma se sentia ridículo, si llevaban unas semanas de conocerse, no tenía sentido esta sensación de haber acumulado tantas ganas, como si llevaran años de aguantarse.
Los días siguientes, se dedicaban a escabullirse de los demás, para poder besarse a escondidas, para poder explorar aunque sea un poco, el cuerpo del otro. Hasta que ese día llegó, ese día en el que ambos deberían alejarse para volver a sus respectivas ciudades y esperar con ansias el volverse a ver. Aún así no perdieron el contacto, no sólo se comunicaban en stream si no también por privado, donde las charlas podían pasar de ser graciosad a románticas y de golpe a sexuales .
_Ya apagué stream_ Dijo, mientras se recostaba en la cama y apoyaba el celular entre su hombro y oreja_ ¿Te mando la foto de mi pija?_ Propuso entre risitas. Alexis se sonrojó.
_Eh... pensé que no me habías escuchado_ Se defendió, mientras se recostaba en su cama para estar más cómodo mientras disfrutaba de la hermosa voz del oji verde.
_Obvio te escuche, pero estábamos en directo... tontito.
_No me digas así, pendejo_ Respondió fingiendo molestia_ Asique... me la vas a mandar?
_ Epa, estas desesperado lindo_ Dijo arrastrando la voz_ Pero si ya tenes una banda de fotos bebé.
_Pero yo quiero una de ahora_ Reprochó, haciendo un puchero como si el pudiera verlo. Rodri se imaginó que lo estaba haciendo y largó una risita.
_Mañoso_ Susurró y arqueo una de sus cejas_ Bueno te voy a cumplir el deseo pero... hay un problema.
_ ¿Cuál?
_ Está dormida, tenes que despertarla..._  Dijo, con la voz ronca. Alex sonrió, mordiendo sus labios_ Vos sabes como...
_ Sos terrible_ Soltó una risita, nerviosa_ Te extraño tanto, extraño besarte, hacerte chupones y dejarte la piel toda roja y marcada.
_ Me encanta eso_ Susurró, sintiendo como de a poco comenzaba a despertarse su entre pierna, mientras imaginaba los labios del peli negro en su cuello y pecho.
_ Si lo sé, te lameria todo el abdomen, recorriendo cada centímetro de tu piel... tan linda y suave.
_ Eso me gusta_ Musitó. Comenzando a tocar el bulto creciente de sus pantalones.
_ Seguro ya estás por tocarte... dios, como me gustaría verlo y subirme encima tuyo_ Susurró. Rodri la saco de sus pantalones para sacarse una foto y enviarsela. Rápidamente Alex la recibió y comenzó a observarla, tocando su propia erección.
_ ¿Te gusta?_ Preguntó_ Comenzando a tocar su longitud de arriba hacia abajo.
_ Me encanta, es tan linda_ Dijo, casi como un gemido, mientras se masturbaba.
_ Dios, te la daría de comer_ Gruñó, mientras aceleraba sus movimientos, ambos imaginando la situación, la boca de Alexis llena por las embestidas de Rodrigo, el sonido de las pieles moviéndose llenando la habitación y exitandolos a ambos, mientras seguían con la charla sucia hasta correrse sobre sus manos, con las respiraciones agitadas.
_Me gustas tanto_ Musitó Alex mientras recuperaba el aire.
_ Y vos a mi_ Susurró, esbozando una sonrisa feliz y satisfecha.