Capítulo Unico

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Me encontré sola en la baldosa sumamente fría, lo último que quería era separarme de este lugar, no quería separarme de su lado, saber que volver a esa casa no sería lo mismo, todo el ambiente sería frívolo y sombrío, la soledad sería la nueva sensación que me acobijaria.

El era el quien brindaba todo el color a mi hogar, no me importaba no tener nada por que el era todo para mí.

Se que a partir de ese instante el calor reconfortante que sentía al despertar cada mañana y verlo totalmente pacifico en la cama después de una noche de pasión no tenía precio. Las peleas con el eran totalmente difíciles, era complicado poder ceder la razón en cada uno.

Su singular cabello en forma de flama, que cada vez que se sintiera abrumado le gustará que lo acariciara y jugueteara con el. Su mirada intensa color azabache que muchas veces mostró miedo, tristeza, desesperación, alegría, deseo y lujuria se apagó totalmente. El calor en sus brazos cada vez que me sentía indefensa en ellos encontraba refugio.

Lo conocí de una forma poco inusual
"nunca estarás sola a partir de ahora" fue la primera frase que oí de el, todos los días de la semana por un total de 2 veces al día me repetía aquel verso, a lo cual mi corazón se aceleraba como si estuviera en una montaña rusa.

Recordar todos y cada uno de nuestros besos, creando recuerdos que durarían por siempre. Todos esos momentos se sellaron en nuestra mente como fotografías que jamás se desgastarian.

"El amor puede doler" no se equivocaron, cuando las cosas se ponen complicadas lo mejor es tratar de hacerlas a un lado y no volverlas a tocar, pero en ocasiones hacemos lo contrario arruinando completamente una hermosa relación.

Jamás olvidaré la cara que puso cuando me confesó su más puro y maravilloso amor, sus labios torpes por besarme por primera vez, esas manos que jamás se alejaron de mi cintura solo por marcar posesión de mi cuerpo. La primera escena de celos está muy presente en mi memoria.

Regresé a casa totalmente desconectada de la vida y prácticamente del mundo, no quería regresar aquí, quería quedarme a su lado todo el tiempo posible como el lo hizo conmigo, todos en algún momento hemos querido regresar el tiempo para evitar miles de situaciones.

Mientras caminaba por el arduo pasillo que conducía a la que una vez fue nuestra habitación observé todos los marcos con cada silueta nuestra, una por cada mes del año. Era obvio Vegeta siempre fue un apasionado por la fotografía que quería plasmar todo momento en una hoja, cada marco me llevaba de la mano para recordarlo.

No soporte más y mis lágrimas volvieron a abundar en mis ojos, todo parecía tan perfecto a su lado, nada nos faltaba si estábamos juntos, ambos superamos el más duro de los obstáculos como el hecho de que mis padres jamás aceptaron está relación por su estatus social.

Pero el era y será el amor de mi vida, no me veía con nadie más que no fuera mi hermoso príncipe Vegeta. Seguía viendo cada una de las fotos, una leve sonrisa ladina se formó al vernos juntos tomados de la mano observando el atardecer, recuerdo eso perfectamente, fue el mismo día en el que nos entregamos mutuamente, ambos estábamos muy nerviosos que no sabíamos por dónde empezar.

La siguiente foto fue de nuestra boda como siempre su mano en mi cintura y nuestros rostros pegados de mejilla a mejilla, el momento es totalmente inolvidable, nuestro vals donde sellamos otro beso más .

Al entrar a la fría habitación vi parte de sus cosas que había olvidado, tomé unas de sus cuantas prendas y me acurreque sobre la cama buscando su calor, la respuesta era clara no era lo mismo si el no estaba a mi lado, suspiraba cada instante su aroma, siempre tan varonil. Estaba cayendo en la tentación del sueño, era evidente todo un día llorando por su ausencia.

Photograph ||V & B||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora