No Importa Que... [Garucca] [Terminada]

Especial.

Gracias por ayudarme en algunos detalles... 

Para todos, les traigo su especial que me habían pedido... 

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La golpe de estado había terminado, todos estaban tratando de llevar sus vidas nuevamente a la normalidad. 
Para algunos les era difícil; muchos de los marcados se habían escondido, y nadie sabia de su paradero; otros debían volver a reconstruir sus hogares.

Los clanes caídos hacían lo posible por construir nuevamente sus muros, sus edificios. Eran los más expuestos. Pero a causa de la alianza que se había realizado, el resto de los clanes eran quienes les ayudaban en sus levantamientos, al igual, en el palacio. 

/En Sanada/

Debido a la cercanía que ahora tenían con Osamu; él había ofrecido hospedaje al clan Takeda mientras comenzaba a ser reconstruida su aldea. 
Por suerte, la construcción iba muy bien las casas estaban siendo terminadas muy rápido y parte de la gente de Isao, estaba volviendo a sus hogares.

En casa del patriarca...

Takeshi estaba volviendo de una misión que le había encargado su padre, y de una de las habitaciones había salido Sara para poder recibirlo.

Sara: bienvenido. [Se acerca]

Takeshi: hola querida. [Le besa la frente]

Sara: ¿Encontraste algo? [Pregunto ansiosa]

Takeshi: nadie lo ha visto desde que fuimos a Nitta. Al parecer esta escondido. [Suspiro]

Sara: tal vez, este en Shina. [Lo mira] Hasta ahora solo hemos buscado entre nuestra gente. Soo debió haberlo previsto y se lo llevo con él.  

Takeshi: es probable. [Dijo cansado] Después iré personalmente a buscarlo. 

Sara: quisiera, ir contigo. 

Takeshi: por supuesto, hay mucho que hablar con él. 

/En otro lado/

Yoana hace poco había salido de la residencia donde se alojaba junto a su madre y hermana. Estaba caminando rumbo al interior de un pequeño bosque, dentro de los territorios de Sanada. Según su opinión, podrían estar por llegar a las fronteras. Por el momento, se encontraba siguiendo a un pequeño halcón que le guiaba desde lo alto del cielo; recientemente aquella ave le había entregado una nota que venia en una de sus garras. Aquel contenido le citaba en medio de los árboles. 
Sin poderlo esperar, el halcón se había alejado por completo de su vista, ahora si estaba perdida. Comenzó a mirar a su alrededor con esperanza de poder verlo ahí...
No muy a lo lejos, y entre los mismos árboles, Gura comenzó acercarse hasta donde ella pudiera verlo mejor; con solo verlo, había olvidado por completo que se había perdido. 

Yoana: no crees, que fue algo exagerado. [Dijo, mientras se acercaba a él]

Gura: lo siento, es solo que, no quería darte problemas si nos veían. 

Desde aquel día en Nitta, la cercanía ambos mantenían ahora era algo muy común en cada uno de sus encuentros, tanto que ahora se encontraban abrazados sin haber incomodado al otro. 

Yoana: no creo que pase. [Lo mira] Te extrañe. 

Gura: y yo a ti. [Suspiro]

Hacía tiempo que no se veían, y fue el mismo tiempo, desde que no se se encontraban de esa forma; Gura la acerco hasta él para poder tenerla como aquel día, en cambio Yoana no se apuso ante su deseo, ella igual lo quería. 
El beso era suave y lento, pero también mostraban todo lo que sentían, tal y como su primera vez.