hasta el último mishu

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— Me caí de la cama — dice con la voz cortada HyunJin cuando sale de la habitación semidesnudo y encuentra a MinHo desayunando en la cocina, quien se asusta de primeras solo escucharlo de pronto en medio del silencio. — ¿Qué hora es...? — se extraña un poco porque sigue estando obscuro afuera.

— Las cuatro — se levanta deprisa para revisar la cabecita de HyunJin, quien no aparta la mano de esa zona. Parece que le duele. — ¿Te pegaste?

— Sí... Con tu mesita de noche.

— ¿Estás sangrando? Déjame ver — intenta apartar los brazos de HyunJin para encontrar la herida, pero el menor no quiere que lo toque, así que toma sus muñecas para sostenerlo con fuerza. Minho se sorprende por el movimiento y se limita a mirarlo a los ojos, como si de pronto le tuviera miedo o algo así.

— Estoy bien — asegura adormilado, con un tono profundo de voz. — ¿Qué haces despierto tan temprano...?

— Me dio hambre... — dice cuando lo suelta finalmente. Camina de vuelta a la mesa y levanta sus platos para dejarlos en el fregadero. — Ya iré a la sala a ver alguna serie o algo, no sé.

— ¿No duermes?

— Acabo de comer...

— ¿Entonces vienes conmigo, por favor?

Minho se siente curioso por el tono que utiliza su menor. Suena exigente y eso le da un poco de miedo, porque apenas horas atrás se veía tan frágil y dormido... Ahora parece que nada pasó. Que no se emborrachó la noche anterior ni se quedó dormido en una cama extraña, en casa de un extraño. Hyunjin luce como si estuviera en su propia casa, como si se conociera perfectamente aquellas paredes, aquellas puertas, aquellas sábanas azules que visten la cama de la habitación de invitados, porque la habitación de Minho en su propio departamento es una habitación de invitados. La habitación principal es y será siempre para Jisung.

Imaginar a HyunJin como alguien que siempre camina por esos pasillos le hace ilusión, incluso si no le gustaría admitirlo. Imaginar que en realidad viven ahí los dos, que HyunJin lo encontró una madrugada en su cocina y ahora lo lleva a la habitación para arroparlo y darle mimos.

Sonríe por la idea cuando HyunJin lo empuja hasta sentarlo en el borde de la cama. En realidad no estaba siendo consciente hasta ese momento, y se asusta un poco porque de pronto HyunJin se sentó sobre sus piernas.

Le toma el rostro con ambas manos para que lo mire; que voltee hacia arriba y conecte sus preciosos ojitos afelinados con los suyos. Y HyunJin no sabe si está nervioso o no, porque parpadea con lentitud en ademanes coquetos, dulces e inocentes.

— ¿Me vas a besar? — le pregunta el menor. Parece que intenta provocarlo pues sus manos se instalan en la base de su cuello para acariciarlo con delicadeza. De pronto toda su falsa confianza cae ante los ojos de MinHo: HyunJin solo está jugando. Solo quiere un beso desesperadamente, es el único motivo de su nueva apariencia de chico pasivo y sumiso. Minho deja salir una corta carcajada a modo de suspiro; un sencillo “ja” que le dice a HyunJin que lo ha descubierto y no le parece divertido.

ʟᴀ ᴛɪᴇɴᴅᴀ ᴅᴇ ᴍᴀsᴄᴏᴛᴀs ¡! ʜʏᴜɴʜᴏ ⚠︎Donde viven las historias. Descúbrelo ahora