Y ahí estaba ella, tan linda, si tan solo ella supiera lo que siento por ella, con su cara pálida y sin expresión, con ese traslúcido cuerpo. Si tan solo ella estuviera viva...
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Historias de la vida misma.
RandomRecopilación de pequeñas historias de la vida, amores, parafilias y la crudeza humana.
Parte 3: la chica de la ventana.
Y ahí estaba ella, tan linda, si tan solo ella supiera lo que siento por ella, con su cara pálida y sin expresión, con ese traslúcido cuerpo. Si tan solo ella estuviera viva...