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TN

Mi mundo se detuvo cuando me dieron la noticia. ¿Porque esta mierda tiene que pasar ahora?

-Digame que es una puta broma -Hablo Erick a los minutos de silencio-.

-Jamas mentiriamos con algo así señor Pulgar -hizo una pausa y luego hablo-. Williams tiene cáncer ramificado. Según los exámenes; el tumor comenzó en el pulmón izquierdo y al no descubrirse rápido fue creciendo hasta ser incontrolable.

-¿Que se puede hacer en casos así? -volvio a preguntar, Erick-.

-Temo que es imposible hacer algo además de esperar su muerte -respondio el doctor-.

-¿Su muerte dice? -Pregunte atónita-. ¿Se da cuenta que es mi hijo el que tiene algo incurable para la ciencia? ¿Acaso usted le diría a su esposa que solo tiene que esperar la muerte de su hijo? Solo porque la mierda que tiene es incurable.

-Señora Pulgar. No le puedo mentir diciéndole que su hijo va a sanar, sabiendo que el destino del cáncer es la muerte.

-No. Solo lo dicen porque son unos cobardes de mierda que solo se conforman con unos putos exámenes y no quieren explorar más a fondo, para descubrir otra respuesta ¡¡QUE NO SEA LA PUTA MUERTE!!

Aguantandome las lágrimas salí de la oficina. Solo quiero desaparecer. ¿¡PORQUE MIERDA NO ME DIO ESA PUTA ENFERMEDAD A MI!? ¿Porque se la tuvo que dar a mi pequeño?

Corrí en busca de la habitación donde estaba William. Al encontrarlo y verlo con los ojos cerrados y cubierto en máquinas solo me dieron ganas de llorar.

-Mi bebé.

Solo atiné a abrazarlo y llorar.

No quería soltarlo.

No me podía imaginar la vida sin el.

Sin mi bebé.

-Mi bella -escuchaba las palabras de Erick pero no quería ni mirarlo-. Princesa... Hey Tn, mírame.

Levanté un poco mi mirada y ví a Erick frente a mi.

-¿Que mierda hicimos mal? ¿Porque tuvo que pasar esto justo ahora? Estábamos tan bien y ahora está mierda... No quiero perder a mi bebé -dije entre lágrimas-.

-Mi bella, no hicimos nada mal. Algo pasa hasta en los momentos más perfectos... Mi bella. A mi también me duele. Me duele el que veré sufrir a mi hijo y mis hijos, veré sufrir cada día a mi hijo. Te veré sufrir a ti. Y no se si seré capaz. Pero mi amor... Seremos fuerte. Siempre de toda la mierda que nos pasan salimos adelante; no sabemos cuál será el final de esto pero no nos daremos por vencidos. Somos la familia Pulgar, mi bella. Una familia que jamás se rinde.

JOSHUA

Mama no a descansado. Desde que le dimos la noticia a William del cáncer se a hecho el fuerte solo frente a mamá.

Cuando no está ella, frente a papá, de mi y mis hermanos; rompe en llanto. Se queja de sus dolores y del que ya no puede más.

Está haciendo todo lo posible para ser fuerte; solo porque no quiere hacer sufrir más a mamá.

Papá y mamá tomaron sus vacaciones. Todos están en casa. No disfrutamos las vacaciones solo nos preocupamos de la salud de William; es nuestra prioridad.

Mamá a hecho millones de llamadas. Con los contactos de papá a buscado a los mejores médicos; pero todos dicen que es imposible hacer nada.

Luchar contra el cáncer es una batalla perdida.

El baño de mis padres se llenó de maquillaje. A pesar de que lo odie, mamá se comenzó a maquillar mucho; Solo para tapar sus ojeras y marcas de lágrimas de William.

La próxima semana viajaremos a Londres. Mama descubrió un especialista en tratar con personas con cáncer. Su prioridad es la salud de William y el viaje.

A nosotros como hermanos no nos molesta. Nos da fuerzas de seguir el comportamiento de mamá. Nos hace darnos cuenta de que si está moviendo la tierra por la salud de William; haría lo mismo y quizás más por nosotros.

Su más preciados tesoros, como ella dice. Algo que hace poner celoso a papá.

Papá es el que está más preocupado en distraernos; se dividieron las tareas. Hace todo lo posible para distraer a William.

Lo saca a tomar aire y sale acompañado de mis hermanos. Y yo me quedo en casa con mamá. A pesar de querés darle su espacio es inevitable dejarla sola un rato.

Siempre que papá saca a William de casa mamá se encierra en su habitación. Lo único que hace es llorar. Me duele verla así.

Se abraza así misma llorando; ocultándose entre ella misma. Y con su mismo cuerpo tratar de tapar sus gritos.

Cuando la abuela sale con William y mis hermanos, solo quedó yo, mamá y papá en casa.

En silencio reina en la enorme casa, solo se escucha el llanto de mamá. Corrimos a la habitación cuando escuchamos cosas romperse.

El brazo de mamá estaba sangrando.

Papá corrió a abrazarla mientras yo iba al baño corriendo a buscar el botiquín de emergencia. Al volver lo que ví me dejó en shock.

Mama tratando de golpear a papá, con sus golpes de bebé; mientras su cara estaba empapada en lágrimas, de su boca solo salían gritos de dolor y de su brazo solo escurría la sangre.

Pero papá se dejaba golpear; se dejaba que mamá se desquitara con el. Mientras que sus ojos solo mostraban tristeza y su rostro un esfuerzo por ocultar la tristeza.

Al verme papá tomo con fuerza a mamá para yo poder curarle su brazo. Y le cantó.

Lo hizo de una forma en la que mezcló el llanto, la felicidad y la tristeza. Una manera de cantar que solo lo hacía con mamá. Una forma de calmarla.

Y lo hizo.

Mama dejo de golpearlo mientras escuchaba atenta la canción; mientras que de sus ojos no dejaban de correr las lágrimas.

Ví esa oportunidad y con delicadeza le cure el brazo.

Hace dos semanas le diagnosticaron cáncer a William. Desde ese día mamá deje de usar ropa escotada. Desde ese día se privó de ella usando la ancha ropa de papá.

Ahora se el porque...

En sus brazos tenía muchas heridas; algunas cicatrizando y otras abiertas... Ella nos ocultaba esto...

Mire a papá tratando de buscar una respuesta pero el solo me miró con pena. El sabía lo que le pasaba a mamá.

El sabía cómo acabaría esto.

Nosotros •||Tn Y Erick Pulgar||• Pt. 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora