[Narrador omnisciente]
13 de noviembre 2021: Un pelinegro se encontraba tumbado en su cama, mirando al techo perdido en alguna mancha que había en este, su mente divagaba mientras las lágrimas silenciosas caían de sus gatunos ojos apagados, habían perdido el brillo el día que asesinaron a sus padres, dos lobos de sangre pura, un Hell y una White que cometieron el error de amarse y de dar a luz a dos cachorros, un alfa y un Omega con una diferencia de edad de más o menos 5 años, los demás clanes conspiraron para acabar con los Hell y destruyeron a todos cuantos pudieron con la intención de acabar con aquel raro y único clan de lobos con sangre de dragón, les tenían miedo y odio aunque nunca habían hecho nada para ganarse aquello, siempre cuidaron a los suyos y a los demás, aún así no tuvieron ningún tipo de compasión, solo se salvaron los dos pequeños cachorros, quedando así la responsabilidad del más pequeño a un niño de solo 15 años, solos y vulnerables.
El mayor siempre cuido de su hermano, sacrificó su sueño de ser compositor y pianista para dedicarse a restaurar la empresa de su padre para buscar una sostenibilidad económica, se alejaron completamente de aquel pueblo para viajar a la cuidad a empezar de cero, el pequeño que algunos años después creció siendo un risueño adolescente dejó a su hermano para hacer un viaje relacionado con su carrera de danzas sin tener ninguna objeción por parte de su mayor pues estaba feliz de que su hermano cumpliera sus sueños cosa que el no pudo.
Ahora se encontraba solo, eso lo abrumaba, aquellos recuerdos y emocionen llenaban su corazón de dolor y hacían que tanto el como su lobo interno, un alfa, se sintieran medio muertos, sentía culpa, había sido un pequeño ingenuo pero ¿Que culpa tenía el? Solo era un chiquillo ¿Cierto?
No estaba seguro y eso hacía que cada día desde la partida de su hermano su estado de ánimo se mantuviera por el piso, se quedaba hasta altas horas de la noche despierto y sobreesforza va su cuerpo en el trabajo la mañana siguiente. Si vida había perdido todo tipo de sentido y tampoco tenía ánimo alguno de buscar algo que le devolviera la alegría, por su edad ya debería haber encontrado una pareja, era necesario o moriría pronto, necesitaba a su destinado, pero no sabía si aquello realmente existía, tenía miedo de volver a confiar y causar otro desastre, para el lo mejor era dejar que el tiempo pasara y aceptar su triste final.
[Narra Draco]
Y así de nuevo entre muchos pensamientos en su mayoría no buenos llegó otro día, me levanté para hacer mis necesidades y me vistí con ropa casual, por suerte era mi día libre y aprovecharía para ir a una tienda de música, mis gatos habían dañado algunas partituras de piano que aún conservaba, porque si, aunque no hubiera podido desempeñar profesionalmente amaba aquel instrumento con toda mi alma, pues era aquello que me apasionaba. Me arreglé un poco el cabello para no verme tan deplorable y maquillo un poco las ojeras de mi rostro antes de salir y caminar a la tienda. Entró mirando los diferentes álbumes que habían en los mostrarios, traía uno en mis manos mirándolo con detenimiento, sin conocer el autor solo leyendo un poco la letra en mi mente divagando hasta que una voz desconocida me trajo a la realidad, tenía un tono dulce y animado, aquello despertó mis sentidos y me hizo voltear para ver de quién había provenido mientras analizaba las palabras que había dicho aquel chico de tez pálida, mejillas abultadas, cabello rubio y labios gruesos.
Xx: - La canción es bastante...no sabría decirlo con exactitud pero ahora quiero saber cómo se llama-
Hablo aquel chico mirando el álbum que aún sostenía sobre mis manos, pronto su delicado aroma llegó a mis fosas nasales, mi lobo aulló en mi interior dando una señal de vida que desde hacía mucho tiempo no hacía, me quedé callado aún mirando al chico y volteé el álbum para tomarle una foto y buscar en línea el nombre de la canción teniendo como resultado el nombre del autor.
-No se el nombre de la canción pero creo que su autora es esta mujer de la foto, tal vez si buscamos más encontraremos su nombre-
Hable manteniendo una pequeña sonrisa mientras miraba al más bajito, no mucho pero si eran algunos centímetros de diferencia, le entregué el álbum para que pudiera verlo por el mismo junto con el teléfono.
Xx: -Vaya...muchas gracias por tomarte el tiempo de buscarla, ahora puedo leer un poco más la letra.- Hablo el chico mirando ambas cosas - Es bastante ¿Triste? Melancólica quizás..-
-No hay de que, la verdad si, mayormente usada cuando una persona muere-
Hable sin perder el contacto visual soltando de forma natural un poco de mi aroma, no entendía por qué me sentía como con ese chico, pero me tenía algo embobado.
Xx: -Eso es lo que pensé, a mi parecer es una canción bastante bonita de todas formas, a pesar de que es para un amor que "murió", entre comillas porque sólo murió la persona, más no el amor.-
Escucharlo hablar me cautivaba cada vez más, sentía que me entendía, tal vez estoy loco o son solo tonterías que pasan por mi cabeza...
-La verdad si, muy expresiva y muestra sentimientos muy profundos que hacen que recuerdos de aquel amor perdido por culpa del destino-
Respondí con más confianza, poco a poco me sentía más cómodo de poder hablar con el así
Xx:-Me sabe amargo-
Dijo el contrario haciendo una pequeña mueca.
-Concuerdo contigo, ese sentimiento de un último adiós o ni siquiera haber podido dar ese último adiós, el vacío en el pecho y el dolor en el alma-
Hable sintiendo poco después un nudo en mi garganta que ignore para no quebrar mi tono y dañar la conversación.
Xx:-Es verdad, Algunos ni siquiera llegan a poder despedirse como es debido, ay yo siento que, los que fueron capaces de despedirse son ligeramente más afortunados.-
-Es verdad pero quien más sufre es aquel que ama, que guarde la mínima esperanza de que va a volver aunque sabe que no es posible por qué su luz se apagó y se llevó con ella la vida de su amado.-
Hable sin poder evitar que mi voz se quebrara a lo último por lo que me calle y suspiré.
Xx: -No pudiste despedirte...¿Puedo darte un abrazo? No es que sienta lástima. Es solo que, duele e imagino que más a ti que fuiste que lo pasó...-
Hablo aquel chico haciéndome sentir vulnerable de nuevo...
-No creo que sea lástima.-
Murmuré antes de abrazarme a él aún si no lo conocía, en tan poco tiempo ese chico logro hacerme sentir una gota de esperanza que había perdido hace años, una pequeña gota de compresión que necesitaba.
-Soy Draco, mucho gusto-
Hable sin sin separarme del abrazo que era correspondido por mi adverso.
Xx: -Luar, un placer.-
Su nombre, hermoso como quien lo poseía, quien iba a pensar que algo tan simple y espontáneo como el nombre de una canción iba a cambiar todo mi mundo.
Continuará...