Coma (Songfic KyuMin)

Pate única

-terminemos........-

Esa palabra reverberaba en su cabeza.

Recordaba cada palabra hiriente dicha por el mayor, sabía que ese día llegaría. Pero dolía demasiado, su indiferencia y frialdad al tratarlo se clavaban en su corazón como pequeñas dagas.

Después de tu ida, estoy perdiendo mi racionalidad.

Cada noche, estoy emborráchandome con alcohol,

maldigo en voz alta porque pienso en ti, que eres tan frío.

Me siento horrible, grito fuerte con enojo.

Aun recordaba el día en que comenzó todo....

Ahí estaba el, recién integrado al grupo, estaba nervioso y ansioso, tenía miedo de ser rechazado por los demás miembros.

El manager lo estaba presentando con los demás y decía palabras sin importancia para el en esos momentos de nerviosismo...

-Soy Cho Kyuhyun espero nos llevemos bien- dijo el ahora maknae de Super Junior haciendo una reverencia hacia sus nuevos compañeros, al levantar su cabeza sintió una mirada penetrante dirigida hacia él, busco de reojo a la persona responsable y se topó con un tipo bajito, de cara pequeña, le sostuvo la mirada a pesar de que esta le incomodaba. Se fijó mejor en sus rasgos, tena una piel blanca que brillaba con la luz, sus ojos a pesar de verlo con intensidad eran muy lindos, por otra parte tenía unos labios rosados y gruesos en forma de corazón.

-Bienvenido~- comenzaron a canturrear los demás miembros mientras se acercaban. Kyuhyun no podía quitar la vista de ese joven, tenía algo que lo hacía adorablemente misterioso. Escuchaba como cada uno de sus ahora compañeros se presentaba hasta llegar al turno del bajito.

-Bienvenido soy Lee Sungmin- y en ese momento lo supo, al escuchar esa voz algo aniñada pero a la vez varonil, supo que estaba perdido ya que desde ese momento le perteneció en cuerpo y alma al mayor.

De eso ya habían pasado varios años, durante los cuales se adaptó bien, tanto a sus compañeros como al trabajo, y cada día que pasaba se hacía más cercano a su hyung, si, su hyung, por que en alguna parte del camino recorrido lo había comenzado a llamar así. Había descubierto que este amaba las cosas dulces y el color rosado, y también descubrió que al pinku no le interesaban las chicas, lo que lo hizo inmensamente feliz, ya que así tendría una oportunidad de conquistarlo.

Veo mi rostro reflejado en el espejo roto

Es como las piezas de nuestro amor.

Estoy parado en la punta de este cruel precipicio

Rasgo los recuerdos de ti - no hay nada más.

Un día regresando de los ensayos, decidió tomar una ducha para despejar su mente y relajar su cuerpo debido al extenuante día, entro a la habitación que compartía con el rosado, tomo unas toallas y se dirigió al baño, encendió la regadera y se colocó debajo del chorro de agua dejando que este lo relajara, comenzó a enjabonarse y de pronto sintió que alguien hacia dibujos abstractos en su espalda. En ese momento no supo que hacer, no supo cómo reaccionar, simplemente paro todo movimiento y volteo la cabeza para ver quién era el intruso. Su sorpresa fue grande al encontrarse con su hyung totalmente desnudo, completamente mojado y mirándolo con deseo.

-Me gustas- fue lo que escucho de boca de su hyung antes de sentir como sus labios eran apresados en un beso demandante lleno de pasión y amor, o al menos eso creyó en esos momentos, porque el si lo amaba, siempre lo ha hecho y ahora también lo hacía, a pesar de todo.