Capítulo 37: Descanso

105 12 14
                                    

Abril 8, 1977

Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería

Salón de Defensa Contra Las Artes Oscuras

5:30 p.m.

Quizás a Stella le alegraba que este fuera su último examen. Si bien no era la mejor, Defensa Contra Las Artes Oscuras era una pequeña victoria para ella. Parecía que podría sacar un Supera Las Expectativas para compensar el fiasco que fue el examen teórico de Pociones. Sentía un peso abandonando su pecho en ese momento, además de cierto alivio después de todo el estrés de las últimas dos semanas.

Su mente comenzó a divagar un momento planteándose en cosas que quería hacer ahora que ya no estaba cargada con el estrés de las evaluaciones. Quizás comenzaría a escribir cuentos nuevamente o una novela, quizás comenzar una nueva lectura. En realidad, no, pensó en tener algo como prioridad.

—¿En qué piensas, Ella?—Brianna notó como su amiga tenía la cabeza en las nubes.

—¿Hogwarts por qué no tiene un periódico escolar?—Stella se volteó rápido a verla.

—Eh pues...—Bri comenzó a plantearse eso un momento—. Creo que es porque suelen preferir leer libros como tal o directamente el profeta porque nos la vivimos aquí encerrados.

—Mmm cierto...—Stella dijo asintiendo a la opinión de Bri—. Haré un periódico, Nanna.

—...okay—la pelinegra se encogió de hombros y pensó un poco antes de mirarla—¿Por dónde empezamos?

—¿Empezamos?

—No creas que te dejaré hacer todo esto sola, porque sé que eres capaz de querer escribir cada artículo y relato corto por ti misma en vez de buscar un equipo.

—Eso no es cierto, sé trabajar con gente.

—No es cierto, hay un desacuerdo y tú te molestas porque no sale como quieres.

—...bueno, entonces ¿Qué harías? Si mal no estoy, no te gusta escribir.

—Pues no soy de escribir como tú que te quieres dedicar a eso, pero puedo ayudar en lo que necesites.

—Con razón quieres ser sanadora—rio un poco y la abrazó—. Te contaré, pero necesito organizarme para más cosas.

—¿Qué cosas?—Brianna se sentó en uno de los pasillos y Stella se sentó a su lado.

—Pues organizarme para ser organizada—se rio un poco—. Para alguien que escribe cada cosa que hace y observa, no tengo organización absoluta—ella sacó su diario de su bolso de manera delicada al notar el estado de aquel cuaderno.

—Stella Black ¿Me mostrarás tu diario?—dijo Brianna haciendo como que estaba impactada, aunque en parte aquello si la había sorprendido.

—Sí y no, sólo quiero que veas en qué estado está y mi organización actual—Stella abrió su diario y se lo acercó.

Lo que Bri presenció era un cuaderno escrito en pluma no sólo en las líneas esperadas, sino en márgenes y diversas notas pegadas en el papel. Sumado a esto, habían fotos de sus amigos y de lugares en sus alrededores. Lo escrito eran pensamientos y observaciones en su mayoría, pero cada cierto número de páginas, habían relatos, cuentos o ideas para escribir en futuro. Ya hablando de portada, se veía gastada y las páginas parecía que se iban a caer con el paso del tiempo.

—Pensé que esto estaría mejor organizado, no se veía así hace un tiempo.

—Me comencé a quedar sin espacio y traté de compensar a lo que llega mi pedido de la papelería.

La Noble Casa BlackDonde viven las historias. Descúbrelo ahora