The Idol || Adaptación [G!P]

Secretos (M)

Jennie

Gruñí al escuchar unos pitidos repetitivos, miré a Lisa quién aún seguía dormida y luego busque el sonido, era mi teléfono ¿Quién será a estas horas? Apenas eran las cinco, contesté el teléfono. Pero nadie hablo. Salí de la habitación para no despertar a Lisa.

-¿Hola? -pregunte un poco asustada.

Se escuchaban jadeos, como si estuviera corriendo, no dije nada, solamente me limité a escuchar con atención.

-¿Te crees que has escapado de mi verdad? -dijo la voz ronca del teléfono. Sabía perfectamente a quien le pertenecía.

-Disfruta estos días con tu hijo y la rubia, porque...cuando vuelva será la última vez que veas al niño. -y colgó, me caí de rodillas y sollocé en silencio.

No se lo dije a Lisa ni a los oficiales, pero en verdad si abuso de mi, repetitivas veces, y si yo me negaba, me golpeaba hasta más no poder, a mi me da igual lo que me haga, pero que porfavor no toque a mi niño, es demasiado pequeño, como para experimentar este maltrato. Sólo le pido a Dios que me lo dejé a salvó.

Sentí unos brazos en mi hombro, miré y era Lisa, quién estába abrazándome fuertemente, también lloraba, se levantó y me alzó en sus brazos, me llevó a nuestra habitación, se tumbó encima de mi mientras que me besaba, ya en este punto no estábamos llorando, solo disfrutando del beso y de las acaricias.

Dejo mis labios y paso a mi cuello, solté pequeños gemidos de placer.

-Ahh Lisayaa---me quito la camiseta y el pantalón, y me quedé en sujetar y en bragas, me tapé con las manos por los nervios, está se percató y me dijo.

-Jennie se que tu marido no te lo habrá dicho, pero eres la mujer más hermosa que he visto en mi vida, porfavor déjame hacerte mia-dijo mientras me besaba el cuello lentamente- quiero hacerte sentir bien-dijo en un susurro.

Asentí y sin perder el tiempo se levantó y se quitó los pantalones y la camiseta, yo seguía tumbada boca arriba con las piernas abiertas, se posicionó entre ellas y me bajo las bragas, se volvió a tumbar encima de mi besándome mientras nuestras intimidades se frotaban.

Las dos gemimos de placer, ya me estaba volviendo loca, necesitaba más, le baje los boxers, por la oscuridad no pude verlo, pero seguro que era grande, posicionó la punto en mi entrada y lentamente fue entrando en mi.

No soy virgen pero él era muy grande, el de Kai no era así, asique me tenía que acostumbrar, se me escaparon unas lagrimas y gemí de dolor.

-Tranquila princesa, pronto te haré sentir bien. -susurro en mi oído.

Se empezó a mover poco a poco, ganado cada vez más velocidad.

-Ahh si, si, masss rápido -suplique de placer.

Aumento la velocidad, cada vez iba más y más rápido, mis paredes se contrajeron, está apunto del clímax, hasta que por fin las dos llegaron.

Entre jadeos Lisa se bajó de Jennie y le abrazó.

-Jennie eres mi primera vez -confeso adormilada. Jennie se sorprendió. Porque lo hizo muy bien. La verdad es que también se podría decir que es la primera vez de Jennie, porque Kai solo la violó y la dejaba sangrando y con dolor, pero esta vez fue diferente.

-No está nada mal para ser tu primera vez -le dio un beso y se durmió de cansancio.

"Lisa ¿La tienes en tu casa verdad?"

"Si, el niños también está"
Se escuchó una risa siniestra

"Sabía que no me fallarias"