NIKA
Espero detrás del cristal a que aparezca Martha y veo que viene con un guardia a cada lado.
– Hola – me sonríe.
– ¿Cuántos hijos tiene Varek? - le pregunto.
– Dos, ¿por qué? - frunce el ceño.
– ¿Una niña rubia? - me aseguro.
– Emy – asiente con la cabeza.
Llevo poco viviendo en esa casa pero nunca la había visto. Tienen tanta familia que pensaba que podía ser una prima o yo que sé. Solo he venido a asegurarme.
– Vale – intento finalizar la conversación.
– ¿Tienes relación con tus hermanastros?
– No son mis hermanastros.
– Lo es porque Varek es tu padre – dice obvia.
– Varek no es mi padre – digo por enésima vez.
– ¡Lo es! - se pone nerviosa.
– Lo que tú digas – me toco las sienes cansado.
– Las pruebas de paternidad fallan.
– No voy a seguir hablando de este tema. Adiós.
La dejo ahí y salgo por la puerta. Martha es mi madre, pero eso no significa que la quiera. Toda la vida he estado solo y jamás he necesitado nada de ella.
Sé todos los problemas que tiene y eso me hace respetarla como persona, pero nada más. Me dio la vida pero no ha hecho nada más por mi. No tiene nada que ver que esté internada, he intentado tener una buena relación con ella pero su problema se lo impide.
Nunca ha querido darme el verdadero nombre de mi padre y siempre me agota con que Varek lo es. Hace años se hizo una prueba de paternidad porque yo necesitaba saber la verdad y claramente salió negativa.
Por más medicación y tratamiento que tenga, su problema es grave y no deja de insistir siempre con lo mismo. Así que no, no la quiero porque nunca he tenido nada de ella y no se le puede tener cariño a alguien a quien no ves a penas.
Siempre la voy a respetar como a uno más, está grave y no es consciente. Fuera de eso, no siento nada más por ella.
Casi nunca nadie me saca el tema de mis padres y prefiero que así sea. De pequeño en los centros sociales estuve sometido a muchas pruebas para ver si podían diagnosticarme alguna enfermedad como la suya o diferente. Nunca he tenido nada raro y me alegro, yo estoy totalmente cuerdo.
Las pocas personas que han conocido mi historia, muchas de ellas me achacan de loco por tener una madre así. Es lo único que no soporto, que no me den la oportunidad de conocerme y poder decirles que estoy bien.
Cuando Emy vino a mi casa, me jodió que me preguntara directamente si estaba loco y luego nombró a mi madre, la misma mierda de siempre.
Sinceramente, creo que la que no está bien es ella. Si sus padres y su hermano han sido capaces de pasar de mi, no entiendo porque ella no hace lo mismo.
Debe tener claro de que Martha tiene un problema y no es consciente de nada, debe respetarla como lo que es.
No estoy dispuesto a pagar los platos rotos que dejó mi madre en el pasado. Ella hizo su vida y yo quiero tener la mía propia, sin ningún tipo de relación entre ambos.
Voy a verla de vez en cuando porque según ella si me quiere. Le doy el gusto de ver que estoy bien y nada más.
Tengo claro que no voy a aguantar ninguna estupidez con veintidós años que tengo, si me tengo que comportar como un autentico cabrón con alguno de mis vecinos, lo haré sin problema.
Tengo la suficiente capacidad para cuidarme y defenderme de todo el que se ponga en mi camino, y Emy en ningún momento será especial al resto. Si me jode, la joderé el triple hasta que se de cuenta de que se está metiendo con la persona equivocada.
***
Me siento en el sofá y espero a que vengan mis dos mejores amigos. Son los únicos que tengo y me basta. Nos conocemos desde pequeños y ellos tienen casi la misma situación que yo. A diferencia de mi, ellos no conocen a ninguno de sus padres. Fueron los únicos que no me juzgaron en ningún momento y hasta ahora hemos sido inseparables.
– Ey – les sonrío cuando abro la puerta.
Lena levanta una bolsa de cervezas y entra bailando.
– Eres la mejor – le doy un beso.
– ¿Qué tal con tu madre tío? - pregunta Nick.
– La misma mierda de siempre. Y llamadla Martha por favor – me toco las sienes.
– No va a mejorar en la vida – Lena arruga la boca.
– De todas maneras aunque mejore, no puede salir de ahí. Su condena es firme – me encojo de hombros.
– Bueno pasemos de Martha – Nick da dos palmadas - ¿Qué hacemos esta noche?
– Salir de fiesta ¿no? - nos sonríe Lena.
– Si por favor – me abro una cerveza – pronto entro a trabajar y quiero disfrutar.
– ¿Tienes ganas? - pregunta mi amigo.
– Si, pero más tengo de fiesta – me río.– Pues todo dicho – Lena choca su cerveza con las nuestras.
– ¿Qué mierda se escucha? - se asoma Nick por la ventana.
– No te lo vas a creer – me paso la mano por la frente.
– ¿Qué? - se impacienta Lena.
– Mi puta vecina tiene un puto pato – digo de mala gana – Está todo el día graznando.
– ¿Tienes vecinas nuevas y no me lo cuentas? - dice Nick y se indignan los dos.
– Es una puta loca, no merece la pena saber de ella – me sincero.
– ¿Pero está buena? - pregunta picarón.
– No me he fijado – miento. 'Está buenísima'.
– Habrá que conocerla – se encoje de hombros.
Dedico contarle lo que me ha pasado con ella para que deje de decir tonterías. Ellos saben perfectamente la relación que han tenido mis vecinos con Martha, así que no les sorprende en absoluto.
– Nueva enemiga – Lena hace como que apunta en una libreta.
– ¿Y si tiene algún problema? - pregunta Nick.
– Puede ser, lo he pensado – admito.
– No es muy normal como ha actuado – niega con la cabeza.
– Me paso a Emy por los cojones – les sonrío – no me va a amargar. Antes me la cargo.
– Tu estate quieto – Lena me da dos palmadas en la pierna – que cuando se te cruza el cable te pareces a tu madre.
– Eh – le pego en la cabeza – cuidado con lo que dices.
– Lleva razón – se ríe Nick.
Son a los únicos que les dejo hacer bromas sobre mi vida. Me conocen a la perfección y tenemos confianza.
– No me importa sacar mi lado psicópata con ella – termino riendo yo también.
– Mejor tengamos la fiesta en paz – se levanta Lena - ¿Nos vemos después?
– Claro – afirmo.
– Nos vemos tío – Nick me da la mano.
Estiro las piernas encima de la mesa y me relajo con el silencio.
Ellos viven juntos desde que cumplieron la mayoría de edad. Se llevan bastante bien y prefieren no estar en soledad. Me ofrecieron vivir con ellos, pero yo por mi parte si prefiero tener privacidad, aunque haya días enteros que me los pase con ellos. Me gusta tener mis días aquí y veo necesario tener mi propio sitio para descansar.
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CABAÑA 001 [+21] [TERCERA PARTE DE CELDA 001] [TERMINADA]
Novela Juvenil{ TRILOGÍA 001 } TERCER LIBRO DE LA TRILOGÍA. LOS DOS PRIMEROS ESTÁN DISPONIBLES EN MI PERFIL La vida de Varek y Barbara parece estar resuelta. Pero... ¿Lo estará también la de su hija Emy? Los años pasan y Emy Dawson Scott se convierte en una muje...