Izuku Midoriya conocido como el Orgullo de Yuei, todo apunta a que se convertirá en el nuevo símbolo de La Paz, asegurándose de hacer un cambio en la sociedad, estaba en su tercer años, siendo de los tres grandes, su fuerza era indiscutible, se puede decir que incluso supera a la de All might (por unos pelitos), en su mejor momento, además de estar respaldado por más particularidades o quirk's, que le daban una ventaja abrumadora sobre los demás.
Un experto en combate cuerpo a cuerpo, entrenado por una heroína también experta obviamente, todo apuntaba que ambos tenían una relación un tanto peculiar...
Ya se conocían desde hace dos años, ella era una heroína muy conocida, popular en todo sentido, no era extraño saber que sus videos de ejercicio tenían millones de visitas, (principalmente cuando trataban sobre los muslos), admirada por millones de niño/as que soñaban con convertirse en héroes como ella, utilizada como un ejemplo a seguir.
Lleva unas semanas ausente, no la ven patrullar tan seguido, como antes, ¿Que ocurre?, nadie sabía, exceptuando alguien.
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Un hombre rubio, flaco hasta los huesos se encontraba tomando un café en su nueva oficina, ahora mismo el anterior símbolo de La Paz, All might o mejor conocido como Toshinori Yagi se encontraba enfrente de un peli negro, de aspecto de vagabundo con un parche, también tenía un café en la mano.
El hombre tenía el rostro cansado, también su pupila de su ojo bueno estaba un poco dilatada, (Se había fumado de la buena), este se encontraba frente a frente con aquel ex-heroe, y la segunda figura paterna de su alumno más problemático, (Aunque el se consideraba a sí mismo como su primera figura paterna del chico).
_ ¿Sabes qué pasa con el chico problema? _ pregunto mirándolo directamente a los ojos con seriedad, su muchacho se había portado extraño últimamente, y el sabía perfectamente si el no le contaba nada posiblemente se lo halla contado al rubio venezolano.
Suspiró mientras veía por la ventana _ Digamos... que se encuentra ayudando a alguien, muy importante para el en un asunto muy delicado, creo que se le puede llamar así _poso su barbilla sobre su manos, su chico se había vuelto todo un hombre, bueno desde hace tiempo pero de todas formas, su orgullo hacia el no hacia nada más que incrementar.
_ ¡Suelta todo All might! _Golpea la mesa mientras rechina los dientes_ ¡Yo no soy el único preocupado por el, sus amigos y compañeros, también maestros lo notan! _El desempeño de sus chico se estaba viendo afectado ante sus faltas a clase, incluso olvido entregar un trabajo sobre heroes, ¡Héroes!, lo que más amaba en el mundo las historias de estos sobre sus peculiaridades, entre otras cosas como sus hazañas.
El maestro estaba sien porciento seguro, que el sobre saldría en este trabajo pero, ¡No!, simplemente no lo hizo incluso sus compañeros estaban sorprendidos. Las ojeras que tenía su hijo no sanguíneo, ni adoptivo estaban casi al mismo nivel que las suyas, (También sintió un poquito de orgullo de eso).
All might, suspiro sabia que no se detendría incluso estaría espiando a su alumno para saber que le pasa, decidió darle una explicación.
Al principio aisawa pensó que era una broma, pero entre más oía, su expresión cambiaba a tal punto de estar anonadado por ello.
_ El está.... _
_ Sip _ asintió dejando muy sorprendido al peli negro.