Cuarto Capítulo; ¿Qué harás?

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Las aguas se habían tranquilizado, Wilbur se certificó de que el más bajo tomara los supresores de celo -traídos por Dream, teorizando que la debio conseguir entre las pertenencias de Bad, Recordaba haberle escuchado mencionar que siempre llevaba algún supresor a mano.-. El supresor ya parecía dar efecto por más nervioso que George aparentara estar, lo más importante era que el más bajo aparentaba estar finalmente consciente, dándole a Wilbur un respiro entre tanta preocupación.

Sin embargo, había una duda que no abandonaba su mente, impidiéndole evadir un fragmento de la ansiedad.

"... ¿Qué... planeas hacer ahora?" Preguntó, su suave voz recorrió la habitación en un cálido susurro, sin la menor intención de alterar al pequeño omega, cuál se mantuvo cohibido entre mantas a un lado suyo. Una melancólica atmosfera rodeaba el cuarto, contrastando enormemente con la tranquilidad que era emanada por parte del beta.

Wilbur estaba inesperadamente tranquilo, aun teniendo en cuenta la situación en la que se encontraba. Como si ya hubiera vivenciado algo similar anteriormente. No sin motivo, claro, después de todo tenía muchas amigas omegas, incluso amigos, el haberse preparado para tales casos no era algo de lo que sospecharse.

La única gran sorpresa era con quien estaba utilizando tal preparación; El amigo que siempre creyó ser beta. Aparentemente, tanta preparación no lo prevenía de ser tomado de lo inesperado.

George se encogió en sí mismo, cubriéndose más con las mantas que lo rodeaban, sintiéndose tan miserable como para desear desaparecer.

"No... no lo sé... Esto, esto es tan... argh, no esperaba... no quería que esto pasara, Wilbur." El nudo en su estomagó se retorció aún más ante el silencio que prosiguió a conquistar la habitación.

Wilbur reflexionaba sobre las palabras de George, inquietando al mismo ante el silencio.

Luego de instantes, un profundo suspiro abandonó los labios del beta, quien recargó su espalda contra la pared, observando el techo pensativo. "¿Planeas contarles al respecto?" No fue sorpresa alguna el escuchar un vacile por parte del contrario.

"Yo... no creo que lo tengan que saber en absoluto." Confesó, "Es decir... Quiero seguir con mi vida como está, ¿sabes? Realmente... hum... ¿Realmente necesitan saber de esto?", cuestionó, sin embargo, sin procurar una respuesta por parte de su amigo, tampoco la obtuvo. "No quiero que... las cosas cambien. Me gustan como están las cosas ahora." Aun cuando la persona a la que más quería ocultar tal verdad lo había descubierto, retirándole casi toda su motivación de mantener todo oculto, sabía que si se lo pedía, mantendría las cosas en sigilo, tanto por parte de Wilbur... cuanto por parte de Dream...

Ah, Dream... No quería verlo. El temor de descubrir su reacción ante su verdad protegida por mentiras invadía su pecho como una flecha, cortando la carne e músculos, buscó tanto ocultarlo de él para recibir a cambio que lo descubran. ¿Y si le comenzaba a odiar? No deseaba descubrir que luego de al fin verle a la cara al rubio, la única expresión que le dedicaría luego de eso fuera de desprecio o rechazo.

No soportaría eso, no de él.

El simple acto de plantearse tales probabilidades daba a luz a un ardor en sus ojos que pronto se concretizó en lágrimas rodando por su rostro, la detestaba a aquella idea. Algo en su pecho se apretaba tan fuertemente como para hacerle pensar que se asfixiaría. Hubiera hecho cualquier cosa para evitar que aquello pasara.

Su rostro lentamente se empapaba ante la oleada de tristeza que caía de sus ojos y su cuerpo temblaba. Entre las desagradables sensaciones casi no fue capaz de distinguir la agradable calidez que se posó en su cabeza con el tacto de la mano del beta, en un intento precario de reconfortar al omega Wilbur le acarició la cabeza torpemente, sin la certeza de qué debería hacer realmente. George por su lado, interpreto aquel acto como un incentivo para que se desahogara.

Wilbur nunca buscó tener el papel del consejero, estaba más que satisfecho en su acto de simple espectador. Si necesario, escucharía al más bajo desmoronarse mientras se mantendría en silencio. Al margen de todo, sin el valor de entrometerse. Después de todo, el peso en su pecho de que él no era el ideal para reconfortar al castaño era diligente en mantenerse presente, limitándolo a observar e no hacer más que lo necesario.

Al que George necesitaba aún no recuperaba todos sus sentidos.

Estaba acostumbrado a consolar a sus amigos cuando estos lo necesitaba, pero el hacerlo en aquella específica situación... simplemente no se sentía como lo correcto. Era la misma sensación como el ocupar un espacio que no le pertenecía.

Luego tendría una charla con George, más prolongada para el momento en que estuviera más estable.

Esperó hasta el momento en que el castaño durmiera para salir de la habitación, cerrando la puerta con llave para enseguida guardarla en su bolsillo, por las dudas, claro. No arriesgaría a que los chicos volvieran e entraran al cuarto repleto de feromonas. No se trataba de un problema de confianza directamente con sus amigos, les tenía total confianza, en lo que no confiaba era en aquello que podrían convertirse luego de inspirar las feromonas de un omega en celo, especialmente Sapnap, alguien que considerando de forma objetiva, técnicamente no tiene un vínculo para bloquearle de reaccionar. Además de que era el Alfa con mayor sensibilidad a feromonas que conocía -Si Dream quien no presentaba tal sensibilidad reaccionó de aquella manera, no quería siquiera imaginarse el desastre que ocurriría si del de aroma de cenizas se tratara.-

Bajó las escaleras al certificarse que no hubiera alguna queja verbal por parte de George ante la soledad, encontrándose con el alfa sentado en el sofá, de espaldas a él.

Ahora tenía otro problema al que cuidar.

"¿Los chicos dijeron algo?", preguntó acercándose al sofá. Dream no volteó a verlo ni por un segundo, se mantuvo mirando fijamente a sus brazos aun teniendo su móvil en manos para entretenerlo. Wilbur no podía siquiera imaginar lo que el alfa sentía, probablemente en shock o abrumado por lo recién ocurrido. Decidió pasar por alto tal comportamiento.

"... Dijeron que pasarían a comer en un restaurante. Tal vez vuelvan más entrada la noche, probablemente cerca de media noche." Informó, sin alejar su mirada, de las heridas aun abiertas en sus brazos. El dolor era insoportable, pero en su momento fue de urgencia necesidad para mantener su cordura al margen, él lo sabía.

"... Bien, eso es bueno." Dijo mientras se acercaba a la puerta, recogiendo un abrigo suyo cuál se encontraba colgado en el perchero de entrada. Observó como Dream lo miraba con una obvia interrogante, por lo que contestó con simpleza ante la silenciosa duda. "No creas que pasaré por alto tus heridas. Vamos, levántate, te llevaré al hospital. Tenemos que cuidar de eso." Mandó con diligencia.

Dream vaciló, sin embargo, cuando volvió a observar las magulladuras tan agresivas en sus brazos no tuvo otra opción más que acceder, ahora que la adrenalina había bajado e su consciencia regresaba, el dolor parecía hacerse más intenso. No era dificil el saber que dentro de poco aquel dolor se convertiria en un lamento insoportable.

Tan pronto como el alfa recogió un abrigo, el duo se encaminó al coche, obviamente con Wilbur sentándose en el volante.

El camino fue silencioso, lo mismo en el hospital, por suerte uno de los médicos se encontraba libre e pudo desinfectar los brazos de Dream, aunque para desgracia del rubio, algunas de las mordidas fueron realmente profundas, forzando al doctor a cocerlas porque su cuerpo no sería capaz e cerrarlas solo, aprovechando para vendarlos de forma más cómoda.

El britanico creyó que sería todo un espectáculo el observar a su amigo, luchar en contra del dolor u reaccionar ante la aguja enfrente de sus ojos. Pero para sorpresa del beta, el rubio se mantuvo quieto, en un silencio que no se rompería a no ser que fuera realmente necesario. Ni un gruñido, ni siquiera una queja de su parte, era como si Dream simplemente no estuviera en aquel mundo.

Preocupado, sabía lo que debía hacer para tratar de sacarlo de aquel extraño trance.

En el camino de vuelta, Wilbur decidió al fin hablar, rompiendo un silencio que por muchos minutos fue establecido en aquel coche.

"¿Qué planeas hacer, Dream?", cuestionó, su mirada fija en la carretera, la noche ya dominaba el cielo con su manto de estrellas, desgraciadamente por las luces de California no podía admirarlas correctamente.

"¿A qué te refieres?", fingió demencia, en todo el viaje de ida e vuelta se mantuvo volteado a la ventana observando la vista de un paisaje en constante movimiento, de vez en cuando Wilbur observó como se dividia entre mirar la ventana y sus brazos, pero no dijo nada.

"No te hagas." Cortó "Te estoy preguntando como te sientes al respecto... de lo que pasó." Especificó, suponiendo que tal vez su pregunta era demasiado abrangente, aunque estaba seguro de que Dream lo habría entendido desde el comienzo. Especificando de esa manera, el alfa no tenía opción más que contestar.

Dream mantuvo silencio, supuso que estaba pensando en una respuesta, terminó por suspirar.

"¿Cómo debería sentirme al respecto?", murmuró, su voz era débil, tal vez estaría cansado. "Digo... siempre... siempre pensé que George era beta... y ahora descubro que es omega." Se sentía indudablemente agitado, frustrado e una pequeña parte de él emocionado. ¿Por que le había ocultado algo como eso por tanto tiempo? ¿Le habrá dado motivos para sospechar de él?

"¿Cambia en algo que él sea omega?", espetó sagaz, insinuando un prejuicio que ya sabia no estaba presente en su amigo. Dream lo miró abrumado mientras Wilbur pensaba que al fin lo veía a los ojos.

"¿Qué? Claro que no!... Es solo..." Vaciló, mordiendo su labio, aun sentía el sabor de su propia sangre, era asqueroso e desconcertante, sujetó con delicadeza uno de sus brazos, sentía las heridas palpitar ante el recuerdo. "Lo que pasó fue... debió ser aterrador para él. Crees que me comience a tener miedo?", el miedo era lo que más alteraba al rubio, no quería ser temido por George, aunque tuviera motivos para ello, solo haría con que Dream se sintiera aún más basura de lo que ya se sentía.

"Humm... Viniendo de George, no lo creo." podía decirlo con facilidad, sin morderse la lengua. "Tu debías saberlo mejor que nadie, lo más seguro es que se culpe por lo sucedido."

"..." mantuvo el silencio, aun sabiendo de tal hecho, no podía evitar dudar al respecto, o tal vez, ¿el nudo tan persistente en su garganta e estómago podría ser causado por otra razón?

"¿De qué tienes miedo?" Todos sus amigos lo sabían, Wilbur tenía un sentido muy agudo, empatizaba con otros a un nivel increíble, e a diferencia de Bad, podía identificar cuando algo o alguien no parecía poseer un objetivo respetable. Aun con tal habilidad, podía decir con facilidad que cuál sea la motivación del rubio, no era algo de qué temer. Confiaba en Dream.

"..." Tantas razones para tener miedo; sin embargo, ninguno parecía encajar como respuesta. Los segundos que Wilbur pacientemente esperaba por una respuesta parecían eternos para Dream, una tortura que solamente confirmaba que tal vez no se conocía tan bien como pensaba, o tal vez, no quería admitir su motivo por más que conociera aquello que lo atormentaba. "No...no lo sé."

"Sabes," retomó la palabra, pujando nuevamente a Dream a una charla cuál no sabía si deseaba tener. Aun sabiendo de la incertidumbre ajena, Wilbur continuó; "está bien tener miedo." Una mirada agitada por parte del alfa fue dirigida al británico, esta vez no volteó a corresponderle la mirada, centrándose en la carretera. "Fue realmente inesperado... quiero decir, lo que sucedió nadie podría predecidlo. Ni siquiera yo pude hacerlo... Tengo que darle méritos a George por conseguir ocultarlo tan bien." Bromeó con leveza, creyendo absurdo el que no lo haya sentido.

Tenía una intuición aguda para ese tipo de cosas, y aun así el Omega logró despistarlo. Si bien que no podía decir con descaro que era la mejor opción para sentir el aroma de un alfa u omega.

Dream se limitaba a escucharlo en silencio, su aura bajaba de intensidad a medida que el beta recitaba las palabras que con tan buenas intenciones fueron improvisadas.

"A lo que iba; Ninguno de nosotros estaba o estaría preparado para esto. Lo que sucedió era algo fuera de nuestro control." Debía admirar el autocontrol que debió haber tenido el alfa en tales circunstancias, incluso más por el método que utilizo para mantenerse cuerdo ante todo. Desconocía con exactitud como se sentía estar expuesto a tales condiciones, nunca lo había experimentado por su cuenta, sin embargo, escuchó de muchos que era como luchar con una bestia sedienta por control, ponerse en lugar de un animal así de peligroso sonaba como algo sangriento. No podía imaginarlo como algo más que exhaustivo y aterrador. "Estuviste bien ahí atrás." Volteó a ver al contrario de reojo, brindándole una cálida sonrisa cuál no pudo evitar corresponder.

"Gracias, Wilbur." Por fin sintió como la tensión que envejecía sus músculos se ablandaba, apoyando su espalda en el respaldo de su asiento. Sus esmeraldas volvieron a observar el exterior. De alguna manera, cuál no pudo explicar, sintió como si un rojizo atardecer se hubiera convertido en una reconfortante noche.

El resto del viaje fue tranquilo, envuelto en un silencio acogedor cuál ninguno de los presentes se atrevía a romper. El ruido de la carretera y murmullos de la calle eran constantes, un ambiente ideal para que ambos se permitieran a divagar en sus propias mentes.

Sin embargo, al llegar a casa, Wilbur decidió proponer lo que había estado considerando durante todo el transcurso de vuelta.

"Sabes, George pidió que no le digamos a los demás sobre lo sucedido. Supongo... que quiere adaptarse un poco más, o bueno, en sus palabras quería aun mantener las cosas como son el mayor tiempo posible." Escuchó como Dream cerraba la puerta principal de la casa e caminaba en su dirección.

Wilbur no tuvo problema en esperar a que el rubio ordenara sus pensamientos al respecto mientras el silencio se hacía presente. "Realmente... no puedo culparlo por eso." Trataba de ser lo más comprensivo que le fuera posible. Si estuviera en el lugar de George, también se hubiera sentido abrumado, seguramente incluso más de lo que se sentía Dream en aquel momento. "¿Crees que sea mejor idea el que tú y Sapnap cambien de cuarto? Es decir; si Sapnap entra sentirá las feromonas de George." Sugirió, ciertamente, preocupado al respecto.

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⏰ Última actualización: Jul 27, 2022 ⏰

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