El vaquero fantasma - Season 6

Capítulo 10 - 6B

Al día siguiente me fui con Lydia ya que me dijo que fuera al hospital ya que quería saber como es que Halwyn - el Höllenhund que Monroe mató con una bala de Gerard - la llevó hasta el otro cadáver estando muerto y ya que yo "debería" estar muerto ella quiere saber si es algo parecido a mi ó así.

—Así que un Höllenhund muerto te llevó hacia allá anoche, ¿y crees qué fue su fantasma? —lo veo sobre la mesa

—Técnicamente muerto —corrige Lydia

—¿Técnicamente muerto? —pregunta Malia

—Técnicamente muerto, de estar muerto no la hubiera llevado.

—¿Podrían dejar de decir eso y concentrarse? —Lydia nos regaña

—Perdón.

—Como sea, ¿qué esperas qué haga? —veo a Lydia

—Tienes una conexión con Parrish que es lo mismo que él, quizá con él también, ¿sientes algo?

—Mmm....—cierro los ojos y pongo mis manos frente a él —Ya veo... bueno él...—me interrumpe

—Wies, ésto es serio.

—Estoy siendo serio, ¿ok?, trato de sentir su alma.

—Bueno, pues trata de sentirla con algo que se vea más real —responde Malia

« Qué estupidez » pensé

—Bien —ruedo los ojos —Pero creo que deberíamos preguntarle a él directamente.

—Wies —ambas me ve.

—No, en serio —me ven —Si buscamos la manera de preguntarle él podría decirte, siento que no está muerto, tiene su alma adentro aún, sólo está como...en una clase de coma ó algo así, pude sentirlo.

—Bien, si tú lo dices hagamoslo, eres el experto en muertos y almas.

—Bien, ¿Lydia?

—No tenemos nada que perder con intentarlo.

—Bien, en ese caso —le acerco una camilla —Adelante mi señorita pelirroja.

Lydia se acostó en una camilla de metal frente a la otra donde estaba Halwyn concentrándose en ver su lograba contactar con él mientras que Malia y yo estábamos sentados en el suelo al lado de ambos. Esperamos un poco hasta que me asomé un poco para verla.

—¿Ya sientes algo? —susurre

—¿A diferencia de hace 3 minutos cuando preguntaste?, no —responde susurrando

—Wies —me da con el codo —Deja que se concentre —susurra Malia

—Perdón pero me estoy aburriendo y la ansiedad me está matando —respondí susurrando

—Todo estará bien, ya calmate —susurra Malia

—Y estaría mejor si ambos se callaran y me dejaran concentrarme —susurra Lydia

—Perdón...—susuramos al unísono

Esperamos unos minutos pero aún parecía no suceder nada así que Malia y yo nos volteamos a ver y está vez, ella insistió.

—¿Qué tal ahora?

—Nada —se sienta —No creo que ésto funcione —la ayudó a bajarle

—Quizá debas tocarlo —sugiere Malia

—No creo que...—toma su mano y la pone sobre él

—¿Algo?

—Nada.