El vaquero fantasma - Season 6

Capítulo 12 - 6B

Volví al hospital por el Jeep y me pareció extraño no ver movimiento adentro, digo, es un hospital, se supone que hay muchas personas como enfermeros, enfermeras, doctores, pacientes, etc. Pero por alguna razón se veía menos de lo que debería.

Incluso algunas de las luces parpadeaban, pero recordé que así fue como dejamos el hospital después de Halwyn así que lo ignoré, subí al Jeep pero sentí esa cosa, había algo que no estaba bien y no me dejaba en paz para nada así que sabía que tenía que ir a investigar.

Me puse la mascarilla y el gorro otra vez - aprovechando que aún tenía la ropa - para no ser reconocido, pero cuando entré me dí cuenta que la verdad no hacía falta porque todos los que estaban en ese lado de la recepción estaban hechos piedra.

Entendí que era lo que sucedía - el Anuk-ite había venido aquí y había convertido a todo un pasillo en piedra-. Salí corriendo mientras seguía el camino que había dejado dándome cuenta que ésto era lo de mi visión, eso de piedra eran las personas y ésto era malo, terrible diría yo.

Pero cuando creí que nada podría ser peor, me asomé por la ventana de la morgue viendo a Gerard hablar con él Anuk-ite el cual - admito que daba  miedo - pero logré ver de lado que sus ojos eran morados y era otra parte de mi visión.

Todo se iba destapando de cierta manera pero sabía que Gerard sería capaz de todo, si un vez se unió al Kanima, podría unirse al Anuk-ite sin problema alguno y ahora lo estaba viendo...

—¿Ves ésto? —lo saca de su bolsillo—Es una bala de plata, todas las leyendas tienen algo de verdad, ¿no es así? —mueve su cabeza —La leyenda dice que necesitas plata para matar a un hombre lobo, pero la verdad es que necesitas a un Argent — la pone en la mesa

Él giró su cabeza a la puerta así que bajé mi cabeza para no ser visto pero él decidió irse por la puerta de la morgue donde el Anuk-ite también se fue dejando el cadáver de Halwyn ahí.

Suspiré y cuando me iba a ir a decirle ésto a Scott, alguien me interrumpió y me detuvo.

—Doctor, disculpe...

—¿Eh? —la veo —¿Sydney? 

—¿Wies? —me ve —¿Qué haces aquí?, ¿y vestido así? 

—Aah...¿Trabajo aquí? —sonreí nervioso —Como sea, ¿tú qué haces aquí? 

—Te estaba buscando.

—¿A mí? —dije confundido

—Sí, Wies...—ve al rededor —Sé que no debería decirte ésto pero...yo era amiga de Lori, ella era mi mejor amiga y yo sabía lo que ella y Brett eran...y sé que los cazadores son quienes los mataron, por eso debo decirte algo importante...—me ve susurrando

—¿Decirme qué? 

—Gerard le provee a Monroe todas las armas que nos dan...tienen todo un armamento que podría abastecer hasta un ejército de más de 100 soldados...estan planeando una masacre y cada día más hay más personas uniéndose...

—Oye, calma —pongo mis manos en sus hombros —Lo sabemos, pero no te preocupes, nosotros haremos lo posible porque ésto se termine, no queremos más muertos que no sean los dos líderes de la masacre.

—Nolan y yo...acordamos estar de su lado...él irá a hablar con Liam y vendrá a molestarle algo que tienen que ver...

—Sabía que él ayudaría igual que tú, ustedes dos son nuestros infiltrados pero tengan cuidado, ellos son capaces de matar incluso a los suyos por su causa, cuidate, ¿sí?

—Sí, igual tú, gracias por ayudarnos Wies, ah y, creo que tienen a unos amigos tuyos también...no recuerdo sus nombres.

—No te preocupes, gracias por decírmelo Sydney.