Rosé y yo +18 (Blackpink)

Noche febril, pero no de enfermedad

Cuando los volví a abrir fue para sentarme de un sobresalto.

Tranquila, estabas teniendo una pesadilla - me dijo Rosé, que veía televisión a mi lado. La miré y no pude evitar lanzarme sobre ella. Subí su polera de pijama para manosearla y bajé sus pantalones.

Cariño, tienes fiebre, espera... - me dijo intentando detenerme, pero yo ya estaba arriba bajando mis pantalones para cogerla sin su permiso.

No me dejes - le dije ida. Rosé se quejaba. Puse mi fruto sobre el de ella y comencé a embestirla, mientras agarraba con fuerza sus pechos desnudos.

Aaah cariño, me haces daño... y aún no estoy mojada - me decía mientras yo no paraba de rozar nuestros frutos.

No me dejes - seguía diciéndole. Rosé continuaba quejándose e intentando quitarme. No le quedó otra opción más que bajar una de sus manos y presionar mi clítoris con sus dedos para que parara.

Me bajé de ella boca abajo quejándome y agarrando mi entrepierna con mis dos manos, muriendo de dolor.

Lo siento cariño, no sabía como detenerte - se disculpó Rosé muy preocupada. Lágrimas salían de mis ojos por el dolor que sentía. Era peor que los manotazos o rodillazos que había recibido, por lo menos esos no iban directo al centro.

Cariño, cariño... - escuché a lo lejos, hasta que caí desmayada, no sé si por el dolor o por la fiebre, quizás por ambos.

Desperté con Rosé limpiando mi cuerpo con una toalla.

Ahora me toca a mí limpiarte, estabas toda sudada, tu pijama está empapado - me dijo sonriendo.

Rosé, yo... - le decía, pero sentí un gran dolor en mi fruto que me hizo recordar todo, llevé mis manos a mi intimidad.

Lo siento Rosé, no sé que me pasa cuando tengo fiebre - le dije disculpándome.

Está bien amor, no es que no quisiera hacerlo, solo que no estaba preparada - dijo sonriéndome.

Me pasó una polera para que me vistiera. Quitó mis pantalones y en eso entró Jennie con comida. No suelo usar ropa interior con el pijama, por lo que mi fruto estaba totalmente al descubierto. Rápidamente lo tapé con el pantalón que me había quitado Rosé.

Pfff como si no te conociera completa - dijo Jennie dejando la bandeja con la cena en la cama - y compórtate, no hagas que tenga que venir a amarrarte para que no abuses de Rosie - me advirtió mirándome un poco enojada.

Lo siento - susurré avergonzada y mirando hacia abajo. Rosé me hizo cariño en la nuca y sonrió.

Gracias Nini - le dijo Rosé con amabilidad - y tranquila, puedo defenderme - agregó riendo y mostrando los supuestos músculos de su brazo.

Cualquier cosa solo grita - le dijo Jennie. Dió media vuelta y se marchó cerrando la puerta tras ella.

Mmmm sopa de verduras - dijo Rosé saboreándose - Jennie cocina muy bien - agregó probándola. Me miró esperando que también comiera.

Realmente lo siento - le dije con tristeza.

Cariño, está todo bien, ahora vístete y toma tu sopa - me dijo besando mi mejilla - además, soy yo la que te da constantemente golpes.

Le hice caso, puse unos pantalones limpios y agarré mi bowl con sopa.

Afortunadamente me cayó bien la comida de Jennie, quitando lo que me quedaba de fiebre, estaba exquisita.

La noche ya había caído, así que con Rosé decidimos acostarnos.

¿Qué tal si vemos un anime? - me preguntó.