CAPÍTULO 14

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EMY

Nika llega con el informe que ha hecho mi padre y lo deja sobre la mesa.

Me cruzo de piernas porque su cercanía hace que mi sexo me duela de placer. No sé como voy a aguantar esto día tras día. Estoy deseando ver a James para ver si puede darme algún consejo que funcione.

No me ha importado en absoluto decirle que tengo una enfermedad, no me avergüenzo de ello, por lo tanto prefiero que lo sepa antes de que me saque de quicio mas pronto que tarde.

Quiero que sepa que no soy una persona normal y que no puede hablar conmigo sin querer arañarme la piel. Hago el intento, pero de verdad me supera, él y cualquier persona.

Ahora ronda por mi cabeza que pueda tener alguna conducta antisocial o algo por el estilo. Me molesta escuchar tanto rato una voz ajena a mí y su comportamiento de entrometido tampoco ayuda.

Ya no actúo con rencor hacia él, simplemente es mi forma de ser. Hago caso a las palabras de mis padres y dejo a un lado que es el hijo de Martha.

Aún así su cercanía me provoca irritación, y sobre todo deseo. Obviamente eso no se lo voy a comentar. No nos conocemos de nada y no quiero que se piense que estoy más loca de lo que ya ve.

Observo el informe de la persona y lo leo detenidamente.

Eduard Stuart. Cincuenta y tres años. Nacido en Derby y actualmente viviendo en Derby también. Tiene mujer y ningún hijo. Desaparecido hace dos semanas. Ubicación no encontrada.

– Un momento – me levanto pasando por delante de él.

Voy hasta la oficina de mi padre y entro cuando veo que está solo.

– Princesa – me sonríe - ¿Algún problema?

– El informe que me acabas de dar – hablo dudosa.

– ¿Qué pasa?

– ¿Acaba de ser reconocido como desaparecido?

– Hay una denuncia de hace días puesta por su mujer. Mi jefe archivó el caso porque hay más urgentes. Pero Nika me ha dicho que era importante así que lo he redactado.

– Vale – asiento - ¿Van a buscarlo?

– Si está muerto, es trabajo vuestro. Nosotros ya no podemos hacer nada.

– Está bien, adiós – le lanzo un beso.

Voy hasta la oficina de Mario y entro cuando llamo a la puerta.

– Antes has dicho que nos ibas a asignar un primer caso – me acerco.

– Si – me estudia con la mirada.

– Acabo de saber de un hombre que desapareció. Ha muerto por asesinato. ¿Puedo encargame junto a Nika? Me parece un caso interesante.

– De acuerdo – asiente – Le daré los otros a los demás.

– Gracias – sonrío.

– Todo lo que sepas, házmelo saber – dice antes de que salga.

– De acuerdo.

Voy hasta la oficina y puedo ver a Nika medio cabreado. Tengo que estar poniéndolo nervioso tanto salir y entrar.

– Nos vamos a encargar de este caso primero – le aviso.

– Muy bien – dice con los dientes apretados.

– ¿Seguro que no lo conoces? - pregunto de nuevo poniéndole la foto en la cara.

CABAÑA 001 [+21] [TERCERA PARTE DE CELDA 001] [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora