Un pendejo hechizado

Episodio 20

Craig dejó de lado las rosas y fué tras él, la había cagado por hacerle caso a su amigo. Finalmente logró alcanzarlo y tomarlo del brazo para impedir que se vaya.

- Tweek, yo...

- No te disculpes - interrumpió soltándose del agarre - sólo no quiero hablar contigo, al menos por ahora...

Tweek se fué sin siquiera dejarlo hablar o explicarse, dejando a Craig con las palabras en la boca y sintiendo que eso definitivamente fué un rechazo.

Durante toda la semana no se hablaron y sólo se limitaban a mirarse a lo lejos pretendiendo que nada pasaba entre ambos.

Clyde le había propuesto otro plan (probablemente estúpido) a su amigo para volver a hablar con Tweek pero esta vez Craig lo mandó al carajo diciendo que ya no quería quedar como estúpido (cuando literalmente lo había hecho varias veces) delante de Tweek, olvidando por completo el supuesto hechizo que le había hecho aunque en el fondo sabía que Cartman no había hecho nada en realidad.

Por otro lado, Tweek no podía siquiera mirar a Craig a los ojos sin sentirse más nervioso de lo normal. Es decir, le había confesado sus verdaderos sentimientos delante de toda la escuela, ¡era demasiada presión para él! sobre todo si había mucha gente mirando la escena y delante suyo estaba Craig esperando una respuesta de su parte.

Durante varias noches no pudo dormir pensando en todo lo que había pasado, ni siquiera su tan amada cafeína lo ayudaba a sentirse mejor después de todo ese desmadre (menos sabiendo que aunque se había distanciado un poco de Craig él seguía esperando una respuesta de su parte, o al menos eso suponía)

Los días pasaban y Tweek seguía sin poder acercarse o hablarle, no es que no quisiera, no podía hacerlo sin sentirse más nervioso de lo normal. Desesperado tuvo que recurrir al consejo de Wendy y el grupo de chicas, además de Stan y Token.

Finalmente y después de varios días tuvo el valor para hacer caso a uno de los consejos que le habían dado.

No te fuerces en decir lo que tú crees que él quiere escuchar. Sólo sé sincero con tus sentimientos.

Un día antes le envió un mensaje a Craig pidiéndole verse afuera de su casa después de clases porque había algo importante que necesitaba hablar con él. Craig aceptó de inmediato.

Al día siguiente Craig fué a casa de Tweek después de la escuela. Esperó un rato y después de diez o quince minutos Tweek salió de casa con una bolsa de plástico decorada con corazones rojos que contenía algunas madalenas y una nota que decía: "do you wanna be my lover?". Tweek le entregó el regalo para luego tratar de huir de nuevo, pero esta vez Craig pudo detenerlo tomándolo de la mano.

- No te vayas, aún no te he dado mi respuesta - Craig sonrió mirando al adicto al café.

Tweek temblaba sin poder mirarlo a los ojos aunque con una leve sonrisa.

- No hay necesidad de muchas palabras o mierdas cursis - Craig rió - seré directo. Me gustas y al parecer también te gusto, ¿por qué no dejamos de darle tantas vueltas al asunto y nos convertimos en una pareja de verdad?

Tweek asintió sin pensarlo demasiado. Con tan sólo una mirada y sonrisas mutuas se lo dijeron todo: se gustan y eran demasiado obvios pero a la vez imbéciles al no notar los sentimientos del otro, supongo que el amor te vuelve así de idiota.

Así pues, iniciaron su relación, una verdadera y sin necesidad de fingir nada. Se conocían bastante bien mutuamente, y aunque era un poco difícil lidiar con las emociones de Tweek Craig se las arreglaba para tratar de entenderlo. Se amaban, y sin necesidad de hechizos ni mierdas así podían demostrarlo día a día.