Ikemen Revolution en Español Act. 2 A través del Espejo [Ruta Lancelot Kingsley]

Capítulo 1

Después de caer dentro del espejo, un hombre llamado Levie apareció ante mí. Me acerco bruscamente y bajo la mirada hacia mí, con los ojos del color de los cristales mágicos.

Levie: Te lo dije. Ahora eres mía.

Hazel: Um, ¡¿perdona?! Eso es bastante atrevido de tu... quiero decir, no, ¡estas equivocado! ¡No te pertenezco!

Levie: Bien, entonces me perteneces, de ahora en adelante.

Hazel: ¿Qué...?

(¿Qué pasa con este chico... Levie? ¿Cuál es su problema?)

No tengo ni idea de que está pasando o por qué. Mientras mi mente iba a la carrera, todo lo que podía hacer era mirar con recelo al hombre que estaba frente a mí.

???: ¡ ...Hazel...!

(¡Conozco esa voz!)

Me gire sobresaltada hacia el espejo que acababa de traspasar.

???: Hazel, ¡¿estás ahí dentro?!

(¡Es él! ¡Me está llamando!)

Hazel: ¿Lancelot? Lancelot, ¿eres tú?

Lancelot: ¡Si!

(Maldición, ¡que brillante!)

De repente, el espejo emitió un estallido de una brillante luz. Y al instante siguiente...

Hazel: ¡Lancelot!

(¡Gracias a Dios que me ha encontrado!)

El alivio se extendió por mi pecho cuando vi a Lancelot reflejado en el espejo. Lentamente, levanto su mano para tocar el cristal, luego dio un paso adelante, a través del espejo hasta llegar a este lado. Su expresión era seria, los ojos de Lancelot escanearon el área rápidamente.

Levie: ¿Quién eres?

Ignorando la pregunta, la mirada de Lancelot se movió hacia la mano que Levie aun tenía en mi brazo.

Lancelot: Suéltala.

Levie: ¡Mm!

Su voz dejaba claro que no era una petición, era una orden absoluta.

Levie: ¿Qué te da derecho a darme ordenes?

Lancelot: ¿No me has oído? Suéltala.

Levie: ¿Huh?

En respuesta a la peligrosa furia que impregnaba el tono de voz de Lancelot, la mano de Levie apretó su agarre en mi brazo por un momento.

Hazel: ¡Ouch!

Levie: Oops-

Cuando grite molesta, aparto la mano sobresaltado.

(¡Ahora es mi oportunidad!)

Me gire sobre mis talones y corrí hacia Lancelot.

Levie: ¡No... tu... Alicia... no hacia allí!

Hazel: ¡Déjame en paz!

Llegue a su lado, mirando dentro de sus ojos azules, que recordaban a las profundidades del océano. Pero no tuve tiempo de sentir alivio, cuando Levie grito.

Levie: ¡Regresa!

Hazel: ¿Qué?

(¡¿Qué demonios es eso?!)

El aire alrededor de Levie hizo un ruido ensordecedor, cuando empezó a deformarse. Su salvaje estallido de emoción no se parecía en nada a la ira silenciosa que Lancelot había exhibido. En un abrir y cerrar de ojos, se había transformado en un remolino de magia que se arremolinaba alrededor del cuerpo de Levie.