Anónimo me encuentro en todas partes

Estuviste ahí todo el tiempo

Una vez me dijeron que si lloraba por no poder ver el sol las lágrimas no me dejarían ver las estrellas ,y la verdad esto es muy cierto.
Fueron pasando los días y junto con ellos me fui enamorando cada vez más ,y él fue al mismo paso que yo ,cada vez podíamos estar menos separados,y nunca voy a olvidar el primer momento especial que tuvimos.Estábamos en una playa y el sol caía lentamente,yo lo besé y supe exactamente ahí que quería permanecer en esos labios el resto de mi vida;sé que son palabras fuertes para un adolescente pero es simplemente la verdad.
A medida que crecía mi felicidad los celos de ese tipo con quien yo tenía que vivir aumentaban también ,hasta que un día no pudo más e intentó separarme de  él ,y esa fue la última vez que intento hacerme daño porque no lo permití,esta vez las cosas fueron diferentes ,yo ya no era una niña y ahora si tenía algo importante por lo que luchar ,así que le deje bien claro que no tratara de hacer nada nunca más porque era mi vida y él no pertenecía a ella ,todo el odio que llevaba dentro se lo hice saber.Mi mamá se quedó asombrada como si no supiera porque pasaba esto y como si fuera poco hizo silencio,no me defendió,y solamente lloraba y observaba ósea que eso significaba que ante todo aquello yo estaba sola .Así que salí sin mirar atrás y llegué a la casa de mi papá quien se preocupó un montón con lo que estaba pasando porque yo nunca le había detallado tanto la situación para no preocuparlo justamente . Ante todo aquello yo pensé que él se había ido para siempre,y me pareció demasiado bueno para ser verdad pero no pasó unas horas y tocaron la puerta de la casa y mi papá abrió,y como solamente él puede hacerlo ,llegó a romper mis esquemas y me abrazó como si solo existiéramos nosotros dos ,yo me quedé asombrada porque nunca pensé que después de todo se fuera a quedar ,pero si ,lo hizo ,y no fue a ningún otro lado .Yo solamente lloraba y él me preguntaba por qué y yo le dije que Dios solamente había podido mandarme a alguien como él porque yo pensaba que de ver mi panorama se iría corriendo.El sonrió y me dijo que él siempre estaría ahí y que no iba a ir a ninguna parte.