No había tenido un buen día... Para nada. Desde que se levantó por la mañana, todo ha sido un tremendo infierno. Se tragó todas sus palabras y bajó la cabeza, ya pasaría pronto, suponía.
Todo había sido tan malo estos últimos meses, todo el mundo se le cayó encima —en el sentido de la suerte, claro— y su corazón se rompía cada vez más.
Desde conflictos económicos hasta la gran disputa de Ucrania y Rusia, la cual nunca vio venir debido a su lejanía. Estimaba a Ucrania, estaba claro, aunque nunca habían convivido lo suficiente como para tenerle un cariño más allá de un compañero de trabajo.
Pese a esto, llegó a su casa. Lastimada y cansada de usar esos pesados tacones negros junto a todo ese uniforme formal. Sus manos temblaban mientras intentaba abrir la puerta principal con las llaves, las cuales cayeron al piso.
Cuando se hincó para levantarlas sintió que el ambiente se encontraba pesado y extraño. Tenia un olor antiguo y bien conocido...
Se quedó allí unos segundos intentando descifrar que fue lo que pasó, sin embargo, fue momentáneo y a los segundos se esfumó.
Ya más enfocada, pudo abrir la puerta y entró dejando un largo suspiro. Lo primero que hizo fue quitarse los tacones y aventarlos al suelo. Solo quería llegar a su cama y dormir como dios manda. Así fue como con pesadez subió las escaleras y dejó ir su cuerpo en la mullida cama.
Sintió no más que calidez y paz. Giró su cabeza y pudo vislumbrar la luna y sus rayos que entraban por la ventana del balcón. Iluminaban todo el espacio sin necesidad de luz eléctrica, y porque, específicamente esa noche, la luna llena brillaba con fuerza.
México comenzó a tararear levemente una melodía que hace mucho no escuchaba, pero debido al momento de hace un rato, no pudo evitar recordarla y fantasear un poco.
Fueron —hace mucho— buenos tiempos, la época dónde más feliz fue y aquel dónde todo parecía ser fácil. Con su rostro alegre, una acogedora morada y un matrimonio muy feliz.
A finales de los 40s, ella y Estados Unidos comenzaron a salir después de su fallido romance de hace mucho. Tanta fue su suerte y felicidad, que decidieron casarse, a pesar de la opinión de los demás y muchos conflictos alrededor de ellos.
Ambos se acompañaron en su mejor momento, y en el peor... posteriormente.
La nueva década les trajo muchos buenos momentos, pero en cuanto Estados Unidos comenzó con su conflicto armado, le traicionó. Desde allí se separaron y no volvieron a hablar de su relación.
Mientras caía en un profundo sueño, sintió todo el cuerpo frío y duro. Vio todo en negro y durante un buen rato sintió como todo el cansancio se esfumaba. En sus sueños, se reproducía lentamente todos los momentos dónde bailó y escuchó la canción que tarareó. Como un disco rayado, una escena dónde bailaba en un salón se repetía.
—Wake up...—dijo una voz conocida.
Cuando abrió los ojos, ya no se encontraba en su cuarto... Bueno, si era su cuarto, pero no dónde durmió. Si no, en el cuarto de un apartamento en el que vivió después de la guerra, en Nueva York.
Al igual que su usual cuarto, éste, tenía un pequeño balcón cubierto por un ventanal. Con debilidad, se asomó con nerviosismo ¿Por qué estaba ahí? ¿Estaba soñando? Pero, acababa de despertar...
Lo primero que vio fue que, efectivamente, se encontraba en la gran manzana, y que, lo segundo fue que todo se veía viejo y antiguo. No sé encontraba en el Nueva York de presente año. Sabía muy bien en qué época estaba parada y qué ocurrió durante esos tiempos.
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Last Night | UsaMex
FanfictionPorque lo único que ella quería, era una última noche. ❥ Fecha de inicio [04/01/2023]