Complementos Perfectos [TERMINADA, borrador]

~7: ¡Maira está enamorada!~

Maira🐾

-Youngblood say you want me -canté en voz baja- Say you want me out of your life

Mientras guardaba mis cosas tenía Youngblood de 5SOS de fondo sonando, últimamente escuchaba música todo el tiempo.

¿Por quién será?

-¡Ya es viernes y no hay clase! -dijo Audrey gritando y haciéndome saltar de mi sitio del susto.

-Joder, ¿era necesario? -dije llevándome la mano al corazón.

-Muuuy necesario -dijo sentándose en mi cama- ¿Otra vez con la playlist de tu novio? -sonrió alzando y bajando las cejas rápidamente.

-Cuando haces eso das miedo -dije señalando su cara- Y no es mi novio -me crucé de brazos y ella se rio.

-Si... -la miré con mala cara- Está bien, no lo es, tranquila -levantó las manos en señal de rendición- ¿Cuándo te vas?

-En cuanto encuentre mi cargador -dije mientras lo buscaba.

-Me abandonas -puso su mano en el corazón.

-Como si te importara mucho, -dije justo cuando encontré mi cargador- sé que en cuanto me vaya traerás a ese chico misterioso con el que sales -abrió los ojos como platos.

-¿Q-qué? ¡No hay ningún chico misterioso!

-¿No? -enarqué una ceja- ¿Y ese chupetón en el cuello? -señalé con la cabeza y ella, instintivamente, se llevó la mano a ese lugar.

-N-no es un chupetón, me... -se puso a pensar- me di con la puerta -quitó su mirada de la mía y me reí.

-Ajá, qué extraña manera de chocar -ella apretaba los labios, nerviosa- Dios Audrey, si me hubieras dicho que te había picado un mosquito aún hubiera sido más creíble

-¡Está bien! Si estoy viéndome con alguien

-¡Lo sabía! -la señalé- Sabes disimular menos que yo, era evidente que algo pasaba, llegabas bastante contenta y con tu ropa arrugada, solo necesitaba una cosa más para cerciorarme, y el chupetón me lo confirmó

-¿Tú no deberías irte ya? -desvió el tema y negué, sentándome a su lado.

-Puedo salir un poco más tarde, no hay problema, es pronto, cuéntame sobre él -dije entusiasmada y aunque ella se rehusaba, al final no aguantó.

-Conocí a un chico ese día que fui a recogerte al trabajo -asentí recordándolo- Estaba llegando y él salió con su perro de la veterinaria, me quedé mirándolo y casi caigo al suelo, porque tropecé, pero él me ayudó y comenzamos a hablar antes de que salieras, me dio su número y no hemos dejado de hablar desde entonces

-Así que, es un cliente... -ella asintió sin mirarme.

Por su gesto notaba que algo quería decirme, pero se resistía a decírmelo.

-¿Ha pasado algo con él verdad? -ella me volvió a mirar y asintió- ¿Te hizo algo? Juro que iré ahora mismo a romperle la cara como... -ella negó y sonrió, deteniéndome.

-Me empieza a gustar... -sonreí, pero ella no lo hacía, y me preocupó- Pero la primera vez que lo hicimos, él dijo que no buscaba una relación seria, y yo acepté tener encuentros ocasionales pero...

-No es suficiente para ti -terminé por ella y me dio una corta afirmación con la cabeza.

-De verdad que no sé qué hacer Maira, estoy demasiado confundida -se llevó las manos a la cabeza- Necesito tu ayuda, enserio