Vuelo 246 con destino a Nueva York, favor de abordar en puerta 4.Ser una extranjera asiática en un país angloparlante es algo complicado, y Chaeyoung es un excelente ejemplo de esto. Gracias a su grande esfuerzo, consiguió una beca en una escuela de artes en Nueva York, y se encontraba en camino a su nueva ciudad. Apretó con fuerza su bolso, mientras caminaba con su mochila en dirección al lugar donde tenía que abordar.
Su mochila de mano solo llevaba cosas importantes, como su medicación para la ansiedad, varios cuadernos de dibujo, fotos de amigos, documentos, y demás. Llevaba sus audífonos sobre sus orejas, no tenía nada de música, pero solo quería que no la molestaran. Las personas frente a ella comenzaron a abordar, y con ello, su ansiedad empezó a subir.
Dentro del avión encontró su lugar junto a la ventana, y como si de magia hubiera sido, cayó rendida al sueño al momento que el vuelo comenzó. Al por fin llegar a su destino, sintió como un aire de adrenalina subía por su cuerpo, nunca había estado tan lejos de casa y mucho menos sola. Había hablado con unas personas que la contactaron de la escuela de artes y le mencionaron que una chica que también estudia ahí y también viene de Corea la iría a recoger.
Fue por sus maletas y no muy lejos de esa zona se encontraba una chica de cabello negro y corto, casi de la misma estatura que ella, quien comenzó a caminar en su dirección.
— ¡Hola! Tu debes ser Son Chaeyoung, ¿no? — Perfecto acento coreano, y una voz melodiosa, esas fueron las primeras cosas que pensó Chaeyoung al escucharla, pero su cara solo mostraba confusión. — Oh, me enseñaron la foto de tu matricula para poder saber quien eras, me llamo Jihyo, Park Jihyo. — La pelinegra extendió la mano amablemente hacia la contraria, quien la tomó y estrechó con poca fuerza.
Comenzaron a caminar en dirección a la salida del aeropuerto, Jihyo hablaba un poco de las indicaciones que le dieron las personas de la universidad. Tenía que llevarla primero al campus para que pudiera matricularse directamente y dejar unos documentos que le pidieron llevar con anterioridad, y además la llevaría al lugar donde ahora viviría, ella, Jihyo y otras dos chicas desconocidas serían roomates. Jihyo tenía su auto parqueado no muy lejos de la salida, solo metieron las maletas y mochila de Chaeyoung en la cajuela, y comenzaron su recorrido.
Jihyo amablemente se ofreció a acompañarla dentro de la universidad, ya que era la primera vez de Chaeyoung ahí y no quería que fuese difícil para ella encontrar la sala en la que la habían citado. Fue un proceso rápido gracias a Chaeyoung, quien siendo una perfeccionista innata, o más bien ansiosa innata, había organizado los documentos justo como se le había indicado, con folders de colores y todo.
Después de eso, ambas chicas fueron de regreso al auto de Jihyo, su recorrido fue en dirección contraria a la universidad. Un edificio alto y elegante se lograba divisar a lo lejos, la chica que iba al volante le iba diciendo que se dirigían al apartamento donde vivirían juntas desde ahora.
— Uh, ¿Cuánto tiempo llevas estudiando aquí? — Esas fueron las primeras palabras mencionadas por Chaeyoung desde que había llegado, cosa que sorprendió un poco a Jihyo, pero se alegró de escucharla hablar.
— Cuando tu inicies tus clases, se cumplirán dos años desde que comencé a estudiar aquí. — Respondió en un tono tranquilo. — Oh, y por cierto, mis compañeras, más bien, nuestras compañeras. — Miró de reojo a la contraria. — Está Kim Dahyun, viene también de corea, y después está mi mejor amiga, Sharon. — Chaeyoung cambió su expresión a una de visible confusión, ¿tres coreanas viviendo con una estadounidense? Jihyo no pudo evitar reír ante la reacción de la chica a su lado. — Myoui Mina, Sharon Myoui. Es japonesa-estadounidense, pero suele usar más su nombre americano estando aquí. Supongo que solo deja que personas cercanas le digan Mina. — Dijo encogiéndose de hombros.