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Quackity se despertó gracias a la luz que se asomaba por la ventana, los primeros rayos de luz se posaron sobre su pelo azabache al igual que sobre su rostro. El primer pensamiento que tuvo al despertar era sobre que tenia que comprar lo antes posibles unas cortinas, nunca lo pensó demasiado, la mudanza de por si fue complicada y cansada. Esto de mudarse a una nueva ciudad, siendo padre soltero joven y después de un matrimonio fallido era algo que tenía que saber sobrellevar.

Se levanto de la cama con el objetivo de dirigirse a la alcoba de su pequeño hijo Tubbo, un pequeño niño de seis años con cabellos castaños y una sonrisa, tan hermosa que el mismo Quackity no mentiría que era una de sus razones para seguir viviendo, a pesar de haber estado viendo a sus dos padres en una relación abusiva y  viviendo en un ambiente poco amigable para su crecimiento, el pequeño seguía siendo tan amigable y tan lindo.

Despejo su mente de todo lo que vivió con su pequeño hijo, al estar más consiente de que ahora podría ser feliz con su hijo empezando una nueva vida alejado de todo aquello que una vez lo lastimo a él y a su pequeño. Entro a la alcoba de Tubbo y se dirigió a su cama con el propósito de despertar al castaño "Tubbo, cariño es hora de levantarse" Quackity se dirigió con un tono de ternura y amor hacia su pequeño hijo, mientras lo mecía suavemente "Papi, por favor solo 5 minutos más" dijo el pequeño castaño con una voz adormilada y aun con sus ojitos cerrados "Vamos Tubs, sabes que hoy tenemos pendientes que debemos de hacer como ir a ver tu nueva escuela, al igual que sabes que debo de ver lo de mi trabajo" Decía Quackity con un tono de voz tranquilo y viendo a su pequeño con ternura.

El pequeño Tubbo abrió de a poco sus ojitos para ver a el rostro de su papi Quackity, soltó un bostezo para después devolverle la sonrisa a su papi, se abalanzo sobre él para darle un abrazo que pronto fue correspondido "Esta bien papi, me prepararé para ir a acompañarte" dijo Tubbo mientras seguía abrazando al azabache "Okey pequeño, te esperare allá abajo mientras sirvo el desayuno para los dos" decía Quackity mientras soltaba a su pequeño y se dirigía a la salida de la alcoba.

El chico de cabellos negros salió de la habitación con una sonrisa por haber visto a su pequeño, y se dirigió a la cocina para preparar el desayuno favorito de su hijo. Mientras cocinaba empezó a divagar un poco en sus pensamientos, hasta que el ruido de su tono de llamada de su teléfono lo saco de sus pensamientos, tomo el teléfono de su bolcillo para contestar a la persona que lo estuviera llamando "Hola ¿Quién habla?" dijo Quackity con una voz calmada "Hola ¿Hablo con el Sr. Quackity?" Se escuchaba del otro lado una voz masculina "Si soy yo ¿Con quién tengo el gusto?" respondía Quackity con un poco de curiosidad en su voz "Con el Secretario George de la escuela Kinoko y que bueno que lo contacto, solo quería avisarle que usted obtuvo el puesto de maestro de tercer grado, solo es necesario que venga hacer un poco de papeleo y puede comenzar el lunes" Decía con una voz monótona el otro hombre a lado del teléfono "Oh muchas gracias por el aviso, estaré en la escuela hoy mismo para lo del papeleo" Con un tono un poco sorprendido contesto Quackity "Bueno lo veré en un rato, hasta luego" Se despidió George sin darle oportunidad de responder a Quackity.

Quackity solo pudo dejar su teléfono de lado pensado en que el secretario al final había sido un poco grosero. Pero por otro lado se sorprendió por la noticia, no esperaba encontrar trabajo muy rápido y sobre todo en la misma escuela en la que inscribió a su pequeño hijo. Después de todo dejar su lugar de origen había sido un buen cambio, solo esperaba que todo fuera bien de ahora en adelante.

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Wilbur amaneció con un horrible dolor de cabeza y con la boca completamente seca. Anoche pareció haberse excedido un poco después de la presentación de su banda, no recordaba exactamente que era lo que había pasado anoche. Solo recordaba como había sido traído al hotel por su hermano y manager Technoblade. Después de todo si lo dejaba solo, el podría hacer un escandalo y más siendo un conocido cantante.

Se levanto con pereza pero debía de llamar a su hermano y a su padre Phil, para preguntar como estaba su pequeño hijo Fundy. Su padre se encargaba de cuidar a su pequeño hijo cada vez que este se encontraba en gira muy lejos de casa. No mentiría al decir que extrañaba pasar tiempo con su pequeño hijo, pero desde la muerte de su amada esposa Sally, se había refugiado en la música y en el alcohol, realmente esperaba que Fundy lo perdonara por estar tan ausente durante estos meses. 

Busco su teléfono en el taburete a lado de la cama, lo encontró y busco en sus contactos el nombre de su padre, marco hasta que escucho el pitido de contestación "Hola hijo, ¿Wilbur cómo ha ido tu gira por las Nevadas?" Escucho del otro lado de la llamada a su padre con una voz serena "Bien, todo ha ido genial, bueno ya sabes quería preguntarte ¿Todo bien con Fundy?" Decía el castaño sintiendo aun su garganta muy seca "Oh ha estado bastante tranquilo, él y Tommy se han llevado bastante bien, solo ya sabes el ha preguntando bastante por ti y quiere saber cuando volverás" Decía el hombre mayor con tranquilidad.

Wilbur sintió una punzada en su corazón, el sentimiento de culpa y remordimiento lo empezó a abrumar "Ya sabes, pronto se acabara esta gira y volveremos a casa, realmente me gustaría ver a Fundy y recompensar mi ausencia" Menciono el castaño con un poco de desdén en su voz "¿Seguro Wilbur? En la última gira dijiste lo mismo, dejaste a Fundy esperando por ti el día de su cumpleaños" Dijo su padre con una voz un poco severa "Lo sé y sabes que me disculpe con él y le envié de regalo esa consola que tanto quería, sabes que trato de compensar mi ausencia" Decía Wilbur mientras se frotaba la frente con su mano "¿Sabes que no puedes comprar su cariño con regalos caros? Wilbur necesitas volver, Fundy te necesita y tú también lo necesitas... se que es difícil desde que Sally se fue-" Wilbur hizo un fuerte sonido con su garganta para interrumpir a su padre "Sabes perfectamente que no quiero hablar de ella" El castaño decía con un tono enojado y triste en su voz. Corto la llamada antes de que su padre volviera a decir otra cosa, volvió a recostarse sobre la cama mientras miraba el techo y pensaba que tal vez era hora de volver a casa.

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Hola! me gustaría comentar que esta es la primera vez que escribo un fanfic, así que si ven un error ortográfico o gramatical, mil disculpas por eso. También otra cosa tratare de hacerlo corto y que no se extienda tanto porque siento que si lo extiendo mucho no lo terminare jaja. Bueno a las personas que lea esto!!

My thoughts will follow you into your dreams-QuackburDonde viven las historias. Descúbrelo ahora