El frio se empezaba a sentir, mi mano se deslizo por la otra parte de
la cama en donde se supone que descansaba mi chico, no estaba. Mi ceño se fruncio mientras me preguntaba donde podria estar tan de mañana, mis ojos se abrieron permitiendome observar la habitación llena de posters de bandas, ropa desordena por cualquier lugar al que observes, un cenicero repleto de cigarrillos acabados en la mesita de noche y una guitarra electrica colgada arriba de un espejo.
Mi ceño se fruncio nuevamente al ver la ropa que habia usado el dia anterior estaba encima de una pila de ropa y mi sosten colgado en la perilla de la puerta café. Me levante lentamente con la mano en mi cabeza, joder el dolor se hacia cada vez mas fuerte y el arrepentimiento empezaba a aparecer, no debí pasarme de tragos en la fiesta.
Agache mi mirada para lograr confirmar que estaba vestida, una camiseta de Metallica que me quedaba algo grande cubria mis pechos y solo mis bragas en la parte inferior.
Un suave olor a café llenó mis fosas nasales, sonreí como idiota.
Froté con suavidad mi rostro con la intencion de quitarme el sueño, cuando mi cuerpo se alejó de la cama empeze a caminar hasta los desordenados cajones de ropa del rizado extendiendo la mano para lograr tomar la cajetilla de cigarros y el encendedor que se encontraba encima del mueble.
Empeze a caminar con lentitud para evitar marearme, saque un cigarrillo de la pequeña caja y con ayuda del encendedor logre prenderlo, lo lleve rapidamente hasta mis labios para calar de este sintiendo la tranquilidad que este me regalaba.
-Desayuna primero linda -La voz agradable y ronca de mi enamorado lleno mis oidos.
-Deseaba relajarme un poco cariño -Dije inhalando humo del cigarro.
-Toma linda -Con una tierna sonrisa en el rostro extendio su brazo ofreciendome una taza llena de café- Sin azucar.
Un suave gracias salio de mi boca, tomé entre mis manos la pequeña taza llevandola hasta mis labios, saboreaba el delicioso sabor de la caliente bebida la cual se mezclaba con el sabor de la nicotina.
-¿Dormiste bien? -Preguntó, sus manos bajaron hasta rodear mi cintura, me atrajo hacia él.
-Como nunca -Di un ultimo sorbo para extender mi mano dejando la taza en el comedor.
Mis manos viajaron hasta su cuello empujando este hacia a mi, besé sus suaves labios rosados. Me separé, mi mano se enredó entre sus rulos mientras que la otra llevó el cigarro prendido hasta mi boca, solté el humo el cual no tardo en golpear el rostro de Eddie.
-Carajo -Un suave gemido salio de mi parte, el dolor de cabeza se hacia mas fuerte.
-La resaca amor.
-Dios si, la cabeza se me parte en dos -Lleve una de mis manos a mi cabeza sobando esta con suavidad- ¿Porqué tu no tienes?
-Por que, linda, yo no tome como loco en la fiesta -Una risa salió de entre sus labios.
-Callate -Golpee sin brusquedad su hombro.
Me separe de su figura para dirigirme hasta el comedor sentandome en una de las sillas que se encontraban rodeandolo.
-Admito que anoche me pase de tragos -Soltó una carcajada sentadose al frente de mi.
-Ni siquiera logro recordar que estupideses hice cariño -Agregué, mi rostro se movia ligeramente mientras mis manos lo cubrian.
-Te subiste a una mesa a bailar -Me arrebató el cigarro de mis dedos, lo llevo hasta sus labios calando de este- Luego empezaste a coquetarme -El humo escapó de su boca junto con una risa al recordar tal escena.
-Cuando te traje a casa intentaste desnudarme, linda -Agregó- Se que te gusto pero deberias de controlarte un poco -Sonrió coqueto.
-Ya callate -Dije con una sonrisa en mi rostro mientras el rubor en mis mejillas ya se hacian notar.
-Deberiamos terminarlo por cierto -Su mirada traviesa recorrió todo mi cuerpo.
No hay como negarme.
-Me agrada la idea cariño.
Extendio su mano hasta el cenicero golpeando el cigarrillo contra este, su mano subio hasta mi rostro dejando suaves caricias en este, me atrajo hacia él. Sus labios se estrellaron contra los mios formando un suave beso que seguramente no tardaria para que subiera de intensidad.
Se levantó haciendo que repitiera su accion, su mano libre nuevamente en mi cintura dando masajes en esta. La humedad en mis bragas se presento al sentir su miembro chocando contra mi cuerpo, sonreí. Mi mano se deslizo hasta su erección tomando esta para empezar a deslizarla por todo su pene con lentitud.
De pronto el sonido de la puerta abriendose hizo que nos detuvieramos, rapidamente me separe del rizado para fijar mi mirada en la entrada de la caravana encontrandome al tio de Eddie con una expresion de asco en su rostro a causa de tal situación.
-Carajo -Susurró Eddie al ver a su familiar, con rapidez cubrio su ereccion con una de sus manos para que este no pudiese verla.
-Por Dios chicos, si van a tener sexo busquen una habitación.
