1. El comienzo de una nueva era

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Capítulo primero.

El comienzo de una nueva era.

Gruñí, a la vez que cogía el celular con pereza. Observé el número de mi mejor y única amiga tintineando en la pantalla; y acto seguido presioné el botón de contestar. ¿Qué diablos quería Anastasia ahora? Seguramente invitarme a una fiesta o algo así. Nosotras eramos increíblemente diferentes. A ella le gustaban los eventos sociales y salir a fiestas todo lo posible, destacándose su personalidad extrovertida. En cambio, yo prefería cientos de veces quedarme leyendo un libro en la biblioteca; mi personalidad era mucho más reservada.

- Ann. - Dije, con voz para nada animada.

- ¡Lily! - Respondió ella, a través del teléfono. Tras de sí se oía el barullo de mucha gente hablando y la música alta.

- Qué.

- No te imaginas lo buena que está esta fiesta, querida. ¿Por qué no te nos unes?

Sabía que diría eso. Ann tenía una obsesión por intentar llevarme a una de esas discotecas llenas de gente, a bailar toda la noche. Suspiré.

- Ni siquiera lo intentes - Sonreí. Ahora venían las súplicas.

- Vamooos, Lilyyy - Casi podía ver como hacía un puchero a través del teléfono.

- Ann, sabes como odio esas cosas - Comenté con un tono amable.

- Oh vamos, solo esta vez.

- Nop - Negué.

- Como quieras, tú te lo pierdes.

Colgó. Reí por lo bajo, todos los Viernes o Sábados por la noche recibía la misma llamada. ¿Cuándo se rendiría? Sigo sin creer que podamos ser tan amigas. Aparte de ser mujeres, no tenemos nada en común. Aún recuerdo con claridad como nos concimos, hace ya unos cuantos años.

"Caminaba por el corredor, cargando un montón de libros en las manos. Apenas podía ver sobre ellos, mis ojos con suerte lograban asomarse sobre ellos. Sí, yo era una clase de nerd total. De pronto; y en un descuido; algo chocó contra mí. En menos de un segundo, me ví a mi misma tirada en el suelo; con un chico de un curso mayor en la misma situación. Él me miró con una mueca de desprecio a más no poder.

"- L... lo sient.. - Alcancé a murmumar.

"- ¿Quién te crees por chocarme así, estúpida nerd? No necesitamos perdedoras torpes en esta escuela.

Otras observaciones a mi apariencia e insutos se hicieron presentes, junto a un montón de risas de otros alumnos. En esa escuela prejuiciosa e interesada, quién era diferente era completamente despreciado.

-¡Quién diga una cosa más sobre ella considérese muerto!

Se escuchó el grito, proveniente de una chica de mi edad que había sido recién transferida. Era despanpanante, su cabello parecía hecho de oro, y la ferocidad que sua ojos azules deatellaban sorprendió a todos. De alguna forma, su expresión salvaje logró acallar a todos. "

Desde ese día que nos juntamos, y que nadie me ha vuelto a molestar.

Sonriendo por los recuerdos, apagué el interruptor de laluz y me acosté en mi cama, preparándome para caer en los brazos de Morfeo.

***

No había podido dormir en toda la noche, embargada por un mal presentimiento. Me daba vueltas y vueltas en mi cama, con esa sensación rondándome el pecho.

Abrí las cortinas de par en par, mirando cómo el cielo adquiría un tono anaranjado lentamente. Acto seguido, me dirigí hacia el espejo, para ver si las ojeras que seguramente estaban ahí eran demasiado notorias.

Mi cabello caía en leves ondulaciones hasta la mitad de mi espalda, haciendo gala de un color castaño. Los ojos que me devolvían la mirada en el reflejo eran de un tono verde agua, enmarcados por espesas pestañas. El morado bajo. ellos, contrastaba un montón con mi tez blanquecina. Maltidas bolsas que habían aparecido gracias a desvelarme por una estúpida sensación.

Suspirando, me encaminé a encender la luz de mi habitación. Pero al no prenderse, deduje que se había fundifo la ampolleta. Grande fue mi sorpresa al notar que ninguna en la casa encendía. Al parecer, habían cortado la electricidad.

Levanté el teléfono para avisar a mi madre del problema, la cual nunca estaba en casa. Ahora andaba por Australia, en asuntos de negocios. Pasaba pocos días en aquí, haciendo que me sintiera como si viviese sola. Mi padre jamás lo conocí, y cada vez que sacaba el tema mi madre lo esquivaba.

Intenté marcar su número. Gruñí de frustración al no oír absolutamente nada proveniente del aparato, la línea telefónica también estaba cortada. Quizás a mamá se le olvidó pagar las cuentas.

No importa, la llamaría desde el celular. Mi rabia aumentó al ver que el móvil no tenía nada de cobertura. Maldita tecnología, justo cuando la necesitaba.

- ¡Mierda! - Grité, rompiendo el silencio.

Esperen un momento, ¿Silencio? ¡Pero si en mi casa nunca lo había! Vivía en plena ciudad, al lado de una avenida principal; la falta de sonido era algo casi imposible. Siempre se oía gente discutir, autos frenar y dar bocinazos; o como mínimo un auto pasar de vez en cuando. Pero no habia absolutamente nada.

Era completamente descontencertante.

Me empecé a poner increíblemente nerviosa, todo aquello era demasiado extraño. Mi lado racional me gritaba que saliera a buscar el por qué, cosa a lo que dije que sí de inmediato. En vez de subir la escalera para ver por la ventana de la habitación de mi madre, preferí salir por la puerta de calle.

Lo que ví me heló la sangre. Quedé completamente paralizada por el terror, mientras las angustia crecía en mi interior. Deseé, con toda mi alma; estar soñando.

Lamentablemente, esa era mi horrible realidad.

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¡Hola hola! Perdonen por no subir, estuve muuuuuy ocupada; y quería escribir unos cuantos capis antes de empezar a publicar. Pero heme aquí, he vuelto para por fin empezar este proyecto. Este capi es corto, y no explica mucho; pero el próximo si lo hace ^^

¿Qué les pareció? ^^ Poorfa comenten y voten u...u ~

Eso es lo que motiva a seguir escribiendo :DD ~ Los veo en el próximo capi!!!

~ Emi

Pd: perdonen los errores e.e

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⏰ Última actualización: Feb 24, 2013 ⏰

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