.·•°Un Slime Heróico°•·.

「.•°Capítulo 2°•.」

Capítulo sorpresa!

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「•°.-Cariño-.°•」

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[Narrador: No tenías mejor título!?

Kai: Pensé más el título que el capítulo -hablo con cierto orgullo- ...Espera, creo que no debería estar orgulloso de eso... -el otro pensó que este es idiota-.

Narrador: Ugh... ya lárgate -tomando el "libreto"-.]

???: P-pequeño, ¿e-estas bien? -hablo la mujer-.

Izuku: Y-yo- U-ugh... -Su vista se nubló un poco y todo dio vueltas, antes de si quiera pudiera responder el chico cayó en la inconsciencia-.

Asustada la mujer se acercó a revisar al pequeño, notando que no tenía ninguna herida suspiró aliviada.

???: Solo se desmayo -se volteó a su esposo- Cariño me ayudas?

??: Está bien -el hombre se acercó al pequeño para levantarlo con cuidado y cargarlo en su espada-.

Caminaron en silencio mientras pensaban en la rara situación que se encontraban.

Algo les decía que el niño era especial..

Las horas pasaron, dando así el comienzo de un nuevo día.

La luz del sol entraba por la ventana de la habitación dando en la cara de nuestro protagonista.

Despertando de su sueño y ante su vista observo el techo del lugar, observando a su alrededor, notando que estaba en una habitación ni muy grande y ni muy pequeña.

???: Veo que has despertado

Escucho una voz conocida, el chico volteó hacia la puerta de la habitación notando a la mujer del día anterior.

???: Y bien, ¿cómo te encuentras? -pregunto con un tono tranquilizador-.

Izuku: B- e-estoy bien -hablo con cierto tono nervioso- "Por qué estoy tan nervioso?" -pensó-.

???: Ya veo, eso es bueno -la mujer sonrío- Oh, que descuidado de mi parte, Mi nombre es Nori, Nori Kota. ¿Cuál es el tuyo?

Izuku: Yo... Soy Izuku -pregunto más tranquilo-.

Antes de pronunciar algo el estomago del niño hizo un pequeño ruido dando a entender que tenía hambre.

Nori pudo notar como el pequeño bajo la cabeza apenado con un rubor en sus mejillas, haciendo que soltara una pequeña risilla.

Nori: Veo que tienes hambre-

??: Cariño, el desayuno esta listo.

Nori: Y parece que también tienes suerte -dio una gran sonrisa la mujer- Bien, bajemos a desayunar algo.

El pequeño asintió y siguió a la mujer..

Al llegar pudo observar como el hombre de ayer el cual estaba poniendo la mesa...

??: Que tal pequeño? -saludo el hombre- Soy Kotaro, Kotaro Kota -se presentó-.

Izuku: Soy Izuku -hizo lo mismo- A-ah y-yo