Mi amado guardian (jelsa)

Una llamada de Norte (capitulo 1)

Era un día nevado por las ciudades donde me encontraba, había llegado a un parque donde se encontrava un niño jugando con la nieve, me senté en la rama de un árbol grande la madera ya estaba llena de nieve se veía linda pero cualquier golpe al árbol y toda esta nieve cairia sobre cualquiera que se encuentre bajo de ella. En ese momento tres niños mas llegaron y empujaron al otro niño quien veía jugar con la nieve.

-oye enano vete de aquí es nuestro territorio. Decía el niño mas grande con cabello negro despeinado usando una chamarra casi mas grande que el.
-lo siento, solo quería jugar. Dijo con la cabeza a bajo.
- que tonto eres ya deberías saber que est lugar es nuestro y solo nosotros jugamos aquí. Decía de nuevo el niño grandote.
-lo siento. Dijo nuevamente, se levanto de la nieve y se fue con la cabeza abajo.
Era claro que no permitiría tal cosa frente a mis ojos, niños arruinando la diversión de otros niños era intolerable para mi así que cuando el niño grandote estaba distraído le habente una bola de nieve haciendo que se enfureciera y creyera que la aventó el niño que acabava de echar.

-oye tonto! Como te atreves a lanzarme eso. Dijo caminando enfurecido hacia el niño inocente.
Habente otras dos bolas de nieve a los amigos del niño grandote pero por suerte a ellos les cayo en la cara dandole paso a mi magia, llenando de alegría y diversion sus espíritus de niños y entre ellos empesaron ha jugar con bolas de nieve, el niño grande los vio jugar y les dijo que pararan.

-oigan como se atreven a jugar sin mi!. Grito molesto.
El niño tímido se les hacerco
-¿que tal si jugamos los cuatro?
-si juguemos todos. Dijo uno de ellos.
-no si esta el! Grito de nuevo molesto.

Tome una bola de nieve y le di en el rostro haciendo que empezará a reír y viendo el lado divertido de todo. Y así los 4 terminaron jugando juntos y claro yo también con ellos aunque no me vieran. La tarde llego y cada uno regreso a sus casas al igual que yo pero al darme la vuelta para irme volando alguien dijo mi nobre. Haciendo que me quedara quieto.

-jack frost?. voltee para ver de quien era y vi al niño tímido.
-hola. Fue lo único que pude decir.
-gracias. Dijo con una gran sonrisa.
Yo le Sonreí y me fui volando y logre escuchar los gritos de los otros niños.

-Miren es jack frost!
-adiós jack!

El viento me llevo lejos y mas arriba y por las nueves gritaba de gran alegría, los niños empiezan a creer en mi! Ya no me sentía tan invicible. Mas tarde a lo lejos vi una aurora boreal eso quería decir algo, y no era de dudar que era un llamado de norte.

-viento llevame al polo norte! Dije entusiasta y sentí como las ráfagas de viento me impulsaban directo a mi destino.