Siempre estuviste tan feliz, no comprendo que te sucedía, se suponía que éramos amigos, no sé qué fue lo que te ocurrió, siempre tan feliz y terminaste así...
-¿Hijo, puedo pasar?
-Ya estas adentro ma
-Perdon ¿Estas bien? Sabes que no es bueno estar encerrado todo el dia
-Ma lo sé muy bien, pero es que no me dan ganas de hacer nada, no hay sentido de nada ahora
-No sé cómo se quedará por lo que estás pasando, pero si necesitas llorar, llora todo lo que quieras, es bueno sacar todo lo que tienes dentro
-Ma solo quiero estar solo, no puedo ni llorar, aún pienso que es un mal sueño, no me lo acabo de creer, solo sé que cada día comprende menos
- solo sal un rato, cuando te sientes listo
Nunca diste señales de que estabas mal como para hacer lo que hiciste, días atrás tenías aspiraciones, una familia perfecta que ahora se está derrumbando, amigos que te escuchaban, entonces ¿Por qué? ¿Por qué lo hiciste? Desde que te encontramos en tu cuarto nada es igual y nadie entiende el porqu...
-Oye amigo tienes abierta la mochila, deja te la cierro- Así fue como empezó todo, siempre ayudando a los demás y tan feliz.
-Oh... gracias, igual revisaré sino me falta alguna de mis pertenencias, digo no es que desconfié de ti- Dije mientras acomodaba mi mochila hacia adelante.
-Tranquilo, está bien no confiar en la gente que te cierre la mochila pensando que ellos pueden hacerlo, está muy bien- simplemente no te afecto en nada y me regalaste una sonrisa.
-Bien, gracias, todo está completo, gracias por tu ayuda- Acomodé mi mochila, me di la vuelta y me fui sin más.
Esa fue la primera vez que te vi y hable contigo, los días transcurrieron y pensé que nunca más en mi vida te volvería a ver, es como esas personas que te ayudan en algún lugar y luego desaparecen, una vez que otra recuerdas a esa persona y lo amable que fue contigo, pero eso no sucedio contigo...
-Ma ¿Por qué las vacaciones se van volando y las clases no?- Pronuncié mientras tomaba una rica taza de café.
-porque cuando uno es feliz no se precipita del tiempo y las vacaciones es igual a la felicidad, sin preocupaciones- dijo mientras limpiaba la mesa donde se encontraban las migajas.
-Bueno ma iré a mi sufrimiento igual al instituto- Sali hacia el mundo sin saber que me encontraría.
Caminar casi en medio de la carretera es mi pasión, lo bueno de ir caminando hacia el instituto, es que podía relejarme y escuchar las gloriosas músicas de Michael Jackson, a pesar de que ya no esté en vida siempre acentuada en nuestros corazones...
-Buenos días chicos, seré su nuevo tutor, soy el señor Alejandro Alejandro, pueden llamarme señor Alejandro al cuadrado, no habrá ningún inconveniente con eso, veo que tenemos caras nuevas, chicos adelante preséntense- El profesor señalo a la chica cuyo nombre no sabía nadie
-Mmm buenos días con todos, mi nombre es Adara Thomson, me mudé aquí hace unos meses por asuntos familiares, espero llevarme bien con todos, creo que no tengo nada más que decir- con eso terminó su pequeño discurso.
-Bueno el siguiente chico cuyo nombre no sabemos, levántese y presente, desconocido- Me señalo y le regale una media sonrisa.
-Si... eh ups, se me cayó el lápiz deje lo recojo- me agache para recoger mi querido lápiz ya lo que me voy levantando me pegué con el pupitre, todos rieron y continué- Bueno mi nombre es Tomas Anderson, toda mi vida he vivido aquí, solo que en este año me change de instituto porque el otro me quedó demasiado lejos- Tome asiento y con esto el profesor continúo dando las indicaciones.
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SONRISITAS
Short StoryTomas es un chico que narra como conoció a su mejor amistad y todo lo que vivieron juntos.