Venditas sean las casualidades, mis bellas hermosas, a veces empalagosas pero llenas de gracia, weno weno si parece que en vez de describir las casualidades esté describiendo una novela turca.
Na vamos a lo serio son algo que no ves venir como cuando subió el precio de la luz, antes era como weno esta carillo pero bueno, en cambio ahora es me cago en la madre que parió a las eléctricas.
Así es pues con las casualidades suelen haber esos cambios drásticos.
Como mi ya mencionado y querido amado y deseado Melendi dice, y el universo conspiró para abrazarlos.
Ayy Ayy qué canción vamos a mi me la cantan y le canto yo, pero porfavor besame ya y no me hagas sufrir.
Weno venga va no insistais mas os contare el porque sobre la casualidad.
Yo he tenido cientas de casualidades, hasta que una lo marco todo, esa era mi mayor casualidad.
Que consiste en cuando en un páramo de clases sociales, emociones y hormonas,comúnmente llamado patio de instituto. Yo estaba apoyado en una canasta desesperado por la mala elección de cambiarme de centro escolar cuando alzó la mirada al horizonte, y ahí la veo ella tan guapa y hermosa. Una chica de ojos al puro color de la cocacola, su cabello negro como el carbon. Unas gafas que a mi sinceramente me gustaban, llevaba los labios pintados de rojo intenso, pelo liso y suelto bastante largo.
Y iba vestida con una camiseta y un peto baquero de color negro.
Y eso para mi fue amor a primera vista, el flechazo menos esperado, y que agradezco como a nada en esta vida, porque fue el mejor regalo que me hizo esta vida.
Pero claro yo era tímido y en ese instante y época era una mujer no un hombre, aunque de esto hablaremos más tarde.
Así que no me hice ilusiones y seguí con el día escolar.
Total voy yo en un septiembre de esos calurosos, de esos que dices seguro que es septiembre porque yo sudo como en julio o agosto. Pero weno nos tendremos que acostumbrar a tomar las castañas en manga corta.
El caso yo chorreandito de sudor, diciendome en que fregao me he metido yo que voy acabar resbalandome y de ahi no me libra ni el santo más santo y el dios más santo Merli Bergeron, enefecto el famoso profesor de la serie, que ami me fascina, para quien no la haya visto la recomiendo una serie de esas para hacerte un maratón divertirse reflexionar es la hostia.
Total que me voy por los cerros de úbeda, iba yo por el pasillo sin casi ventanas al exterior con paredes revestidas de madera con un gris un poquillo deprimente para mi gusto, con una mochila Nike rosa monísima de la muerte, yo muy fashion y con mis sandalias con las uñas mal pintadas y con los pantalones mordisqueados por mi cachorro de 6 meses. Me dirijo a la clase que me toca, observando el magnífico documental de la sociedad estamental y de la sabana en época reproductora, los guais gilipollas por un lado, las guais populares, los que llevan toda su vida en el instituto y por eso se creen los reyes del instituto, en este último un repetidor ahí seguro.
Total luego están los nuevos en los que me incluía yo y por último los extras esos que ni te sabes el nombre ni te interesa y que casualmente nunca te hablan ni tu a ellos y que parece que los vayan sustituyendo por cada capítulo.
Tambien veia los rituales preecoito, como son el beso común, el empotramiento sin penetración en la pared del instituto, la postura mira qué chulo de playa estoy hecho a que te pongo como una moto de lo malote que soy, el beso apasionado con lengua y a la vez mezclado de saliva, y no mucho menos importante la cobra animal peligroso con veneno y impredecible en el uso sobre los seres humanos, sino que se lo digan a David Bisbal.
Pero weno aparte del apareamiento había la clara pelea de los machos alfas y poco inteligentes de la sabana, se caracterizan por tener un ego de la hostia ser insoportables y a veces un poco fachas.
Iba prosiguiendo por el angustioso pero aireado pasillo y menos mal porque eso olia a zoo. Cuando llego a mi destino el aula de plástica.
Entro hago un esquema mental de la clase a lo terminator, salvo que esta vez no buscaba a Sara Connor si no que buscaba un sitio donde pasar discretamente. Yo agilipollao perdido decido ponerme en primera fila, ole mis cojones que poca inteligencia.
Total que la profesora que en dicho momento parecía encantadora más tarde descubriría que no, nos iba contando su asignatura, cuando para socializar decido hablar con la compañera que tenía a mi derecha, la llamaremos J.K Rowling porque le flipa Harry Potter, total que le digo hey que tal busco hacer amigos te interesa. Ella va y me dice claro yo también busco hacer amigos.
Se acaba la clase y vamos al patio y me dice que me va a presentar a más gente y cuando bajamos al patio y me presenta a un grupo de chicas ahí estaba ella, la increíble diosa que mi mirada había observado, me quedé tan sorprendido que casi ni hablé.
Ahí comprendí que las casualidades son grandes obsequios de la vida, y que gracias a esa casualidad conocí a mi diosa hermosa, con la que me encanta pasar la vida.
Posdata no hagais el panoli como yo que estaba tan sorprendido y envelesado por su belleza que parecia un tonto, pero weno no le importo.
