We are in love // James Potter

4.

Eleanor

Habían pasado tres meses desde que me rompí el brazo. Y ya era Navidad. Estábamos en el tren, camino a Inglaterra.

-Perdón Akira, pero sigo sin entender por qué no te gusta la Navidad.-exclamó Peter. Cierto, no me gusta la Navidad. Pero desde que la paso con los Potter, ha empezado a agradarme.

-Desde que la paso con vosotros es mejor. Pero antes de entrar a Hogwarts, no me gustaba nada. No tenía la ilusión que tenían otros niños. Supongo que era porque mis Navidades no eran las mismas que los demás. No nos juntábamos toda la familia, no cenábamos gran cosa y Lily siempre discutía con Petunia.-murmuré con una leve sonrisa. Remus, el cual estaba a mi lado, me abrazó y me dio unos regalices. Sonreí con entusiasmo y le di un beso en la mejilla.

Todos nos íbamos a quedar en casa de James junto a sus padres, Euphemia y Fleamont Potter. Los conocí en primer grado cuando James nos invitó a pasar las Navidades todos juntos. Desde ese momento, ir a pasar las Navidades en casa de James todos juntos es una tradición.

-Tengo ganas de ver a mamá Euphie y a papá Fleamont.-dije con una sonrisa de oreja a oreja. Así es como yo les llamaba.

-Yo tengo ganas de otra cosa.-dijo Sirius mientras me guiñaba y sonreía coquetamente. Remus, Peter y James soltaron un gruñido.

     Las Navidades de primer grado

Eran las 23:59 y todos estábamos esperando a que fuera año nuevo, cuando sonó la última campanada indicando que era año nuevo, Canuto dijo...

-¿Sabes Eleanor? Todo el mundo dice que cuando es año nuevo hay que besar a alguien porque si no lo haces tendrás mala suerte.-dijo con una sonrisa mientras se acercaba a mí lentamente.

-Sirius, nadie dic-pero antes de que terminara de hablar, Sirius me besó. Era mi primer beso, pero fue corto.-¡Qué asco Sirius!-dije con cara de asco.

-¡Sirius te voy a matar! ¡Eleanor es muy pequeña para besar a alguien!-exclamó un James muy enfadado.

-James, tranquilízate, por favor. Yo lo mato.-dije con una sonrisa cínica. Sirius empezó a correr y empecé a perseguir le.

Cuando Sirius pasó al lado de Remus, él le dio una torta en la nuca. Peter se empezó a reír al igual que James.

-¡Au! ¡Remus no me pegues!-dijo Sirius con una mueca. Yo le saqué la lengua.

-¡Por tonto!-grité con una sonrisa.

Cuando recordé eso, me empecé a reír. Todos me miraron confundidos.

-He recordado el momento del beso y me ha dado gracia.-dije con una sonrisa. Todos nos empezamos a reír un montón, ya que fue un momento muy gracioso.

...

Ya estábamos en casa de los Potter y ya era nochevieja. Marlene también vino. Aunque mañana por la mañana se iría a su casa.

Marlene y yo nos estábamos preparando en la habitación que compartíamos en la casa de los Potter. Ella llevaba un vestido blanco hasta un poco más arriba de los tobillos con unos pequeños tirantes. De las caderas para arriba era como un corsé y tenía una abertura para sacar la pierna. Tenía el pelo suelto con ondas.

Yo llevaba un vestido blanco con pequeños detalles dorados. De la cadera para arriba era ajustado, pero después era suelto. Me llegaba un poco más abajo de las rodillas. Tenía dos pequeños tirantes. Marlene me había hecho un moño alto y me había dejado dos pequeños mechones en la cara.

Las dos bajamos las escaleras hasta llegar al salón. Solo faltábamos nosotras. Los chicos iban con traje menos Sirius que llevaba una camisa blanca con los dos primeros botones desabrochados y con las mangas remangadas hasta los codos y unos pantalones negros. Euphemia llevaba un vestido largo color granate y su cabello pelirrojo con ya algunas canas, suelto y con rizos.

-¡Chicas estáis preciosas!-exclamó Euphie mientras sonreía.

-Tu también mamá Euphie.-dijimos Marlene y yo al unísono. Nos miramos y sonreímos.

...

Ya eran las 23:59. En un minuto sería año nuevo.

Cuando dieron la última campanada en la iglesia, Sirius se acercó y me dio un beso como de costumbre. Claro que, no sentíamos nada el uno por el otro. Simplemente era una tradición.

James

Cuando Canuto y Akira se besaron, sentí algo que nunca había sentido. No sabía exactamente que era, no podía identificarlos. Solo sabía que no quería volver a sentir ese sentimiento.

Quizás...

No, no podía ser. Eleanor no me gustaba ni me iba a gustar, es mi mejor amiga y siempre lo será. Además, yo amo a Lilyflor. Y siempre lo haré.

             Narrador omnisciente

Quién le diría a James que las cosas no serían así ni de lejos. Y a Eleanor que la tradición se rompería.

Perdón, se que es muy corto y que he estado inactiva. Pero no he tenido mucho tiempo. Prometo ser más activa, de verdad. Espero que os haya gustado este capítulo. Se vienen cosas muy interesantes.
¡Esperar al siguiente capítulo!Comentar qué opináis sobre los personajes.
Adiós!