Capítulo 1

10.7K 838 210
                                    

Son las dos de la madrugada, las calles en Japón se encuentran vacías, los únicos indicios de vida en la calle son los gatos que se pasean por los techos gracias a sus irresponsables dueños y los postes de luz alumbran la penumbra que la luz de la luna no alcanza a cubrir. Bakugo Masaru se despierta, hay algo que lo tiene inquieto, un presentimiento que se asienta en la boca de su estómago y le impide seguir durmiendo, entonces, dejando la comodidad de su cama, sale de entre las sábanas para dar un recorrido a su casa, no sin antes dejar un beso en la frente de su esposa, quien suelta pequeños ronquidos inquietos al sentir el contacto en su frente.

Camina por la casa un rato, revisa que todas las ventanas estén cerradas correctamente, después de asegurarse entonces baja a la cocina para verificar que todo también esté en orden antes de convencerse así mismo que solo está siendo paranoico. Está a punto de ir a descansar de nuevo, cuando el sonido de la puerta llama su atención; detrás de la puerta de la casa hay alguien que está forcejeando con la cerradura, es torpe, descuidado, él sujeto parece tener prisa y es así que Masaru comienza a marcar el número de emergencias en su celular, mientras que, con su mano libre toma un sartén, caminando hasta la puerta mientras alza su mano, preparandose para presionar el número de emergencias, es en ese momento que la puerta se abre.

Masaru solo tiene un segundo para relajarse al ver quién ha entrado a su casa, sin embargo, su dedo termina por presionar el número de emergencias,poniendo el altavoz mientras suelta el sartén y  corre para sostener a su hijo mal herido, mientras grita el nombre de su esposa para que ella se despierte. Katsuki está muy mal, está sangrando por todas partes, su traje negro está empapado en sangre, por su frente escurre una línea carmín que baja por la mitad de su rostro mientras que de su nariz y boca la escena se repite, básicamente, había sido un milagro que pudiera llegar a casa de sus padres sin perder la consciencia, pero tan pronto ve a su padre en medio de la penumbra, su cuerpo termina por seder ante la gravedad de sus heridas.

Las sirenas de la ambulancia pronto se encuentran interrumpiendo la tranquilidad de la madrugada, es así que los señores Bakugo terminan en el hospital, aún vestidos con sus pijamas y con sus rostros llenos de angustia. Mitsuki camina de un lado a otro, mientras que Masaru está sentando intentando mantener la calma.

-Le dije a ese mocoso idiota, que no siguiera... Juro que cuando se despierte...- La voz de la rubia se quiebra al final de su frase. Está preocupada, ha estado preocupada alrededor de cinco años cuando su hijo idiota decidió convertirse en un héroe, "vigilante", como él lo llama, porque el baboso de su hijo dice que la palabra "héroe" es "una mierda romántica de la televisión", pero es absurdo, porque para el resto del mundo el rubio es un héroe a pesar de que nadie conozca su identidad.

El cirujano sale del quirófano, se acerca a ellos con una expresión cansada después de las largas horas extenuantes de cirujía que le llevó salvar la vida del rubio. En sus años de trabajo,ya conoce esas expresiones de dolor y esperanza, así que les sonríe levemente para que ellos puedan comenzar a respirar tranquilos, entonces comienza a explicarles el procedimiento, lo que tuvieron que hacer durante la cirujía, también las posibles consecuencias que podría haber y que podrían ver una vez que él paciente despertara.

-¡Tonto mocoso ingrato, idiota, baboso, malagradecido! ¡¿Tienes idea de lo mucho que nos preocupamos?! ¡Estuviste a punto de morir! ¡Tu corazón se detuvo un tiempo durante el traslado en la ambulancia y casi no la cuentas!. - Mitsuki estaba hecha lágrimas después de ver a su hijo despertar, aunque sus palabras eran duras y vulgares, se contradijo así misma cuando abrazó a su hijo, quien apenas unos minutos atrás acababa de despertar.

-Mitsuki, cariño, es mejor no abrumarlo, ya nos contará qué pasó. Katsuki, la policía está investigando, es mejor que tengas cuidado. - Masaru abrazó por los hombros a su esposa, dándole unas palmaditas en su espalda.

My Hero [KatsuDeku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora