CABAÑA 001 [+21] [TERCERA PARTE DE CELDA 001] [TERMINADA]

CAPÍTULO 35

EMY

Termino de preparar la maleta y voy a casa de Nika para despejarme.

Las cosas en casa siguen con la misma tensión y mi padre y yo no hemos hablado ni una palabra. Tampoco con mi hermano y mi madre es la única que se dirige a nosotros, aunque no del todo como antes.

Me dijo que lo entendía pero yo también entiendo que se le haga difícil la situación, todo ha sido inesperado.

Estar así con ellos me produce sentir un vacío en el pecho enorme. Mi hermano anda por la casa cabizbajo también y cuanto menos pueda estar aquí, mejor.

He hablado con mis primos y la situación en sus casas es más de lo mismo. Las madres de Zoe se muestran frías y la que más pena me da es ella. Yo tengo a Alan, los mellizos se tienen entre ellos, pero Zoe no tiene a nadie más.

Le he ofrecido venirse a casa, pero obviamente mis tías ni siquiera han barajado la posibilidad. Ahora mismo, no la quieren cerca de mi hermano y en el fondo sé que a mi padre tampoco le agrada la idea. Así que duramente, es mejor que no venga.

Cuando lleguemos a México no sé como nos vamos a distribuir la verdad. Habíamos cogido casas para cada pareja, estando Nika conmigo, Dylan con Lía y Zoe con mi hermano. Dudo mucho que sea así.

– Nena – me sonríe abriendo la puerta.

Me lanzo a sus brazos porque ahora mismo es el único que puede hacerme sentir mejor.

– ¿Cómo están las cosas? - pregunta cuando nos sentamos en el sofá.

– Igual – me encojo de hombros.

– Tendrá que procesarlo poco a poco. No es fácil.

– Lo sé. Pero lo que más me dolió fue su actitud conmigo. Tampoco se ha disculpado.

– Tu tampoco lo has hecho. ¿Por qué no das tu el paso?

– No me sale ahora mismo – admito.

– ¿Prefieres estar con este dolor?

– Tiene que salirme del corazón. No puedo hacerlo obligada – niego.

– Ven, no has venido para estar mal – me abraza.

– ¿Tienes ya la maleta? - sonrío un poco.

– La acabo de terminar – asiente.

– No creo que el viaje sea igual a como hubiera sido si nos hubiésemos ido hace una semana.

– Haremos todo lo posible por estar cómodos – me asegura.

– Siento que tengas que vivir todo esto.

– Estamos en lo bueno y en lo malo – me acaricia la mejilla – y me alegro de estar contigo para que no te sientas más sola. Te aseguro que no lo vamos a pasar tan mal, créeme.

De verdad lo creo. Es capaz de hacerme feliz en el peor momento. Sé que estando él, todo será más fácil.

Lo beso lento para demostrarle todo el sentimiento que tengo hacia él.

Nika dentro de toda la mierda que llevo encima, es lo mejor a día de hoy.

Nuestras lenguas se rozan y un escalofrío me recorre la columna vertebral. Profundizo el beso mordiéndole el labio y suelta un gruñido ronco. Abro los ojos mientras sonrío y ahora es él quien muerde mi labio con fuerza.

– Emy – susurra.

– Mmm – paso la lengua por sus labios.

– Tus ojos...