El legado de la Mafia (Mafia Marshall V)

Capítulo 33

Atlas

Cuando me marcho de la habitación, continúo caminando con pasos firmes, alejándome lo más que pueda de este lugar, con mi corazón acelerado y mi vista nublada de la impotencia que siento, que ni presto atención a todo lo que me rodea. 

Salgo al jardín de la casa hecho una furia, con ganas de patear y romper todo a mi paso. Sin embargo me contengo, esa no sería una buena primera impresión. Aunque me haya presentado como "un posible aliado". 

Lanzo una risa socarrona. Ni siquiera fue él, fue su tía. Claro que no esperaba un titulo más formal, pero un "amigo" no hubiera estado mal. 

Al observar a mi alrededor me percato de que ya es de noche, y el aire frío impacta en mi rostro. Hay tanto silencio y quietud aquí. Se siente tan bien está paz. Eso consigue que la ira y el fuego que se apoderó de mi hace un momento atrás, se apacigüe. 

Del paquete saco un cigarrillo y me lo apoyo en el labio, lo enciendo, para luego guardar todo en el bolsillo trasero de mi pantalón. Le doy una calada y expulso el aire. 

Si, se que sobre exagere. Actué como un niño caprichoso, pero con honestidad ni siquiera lo pensé, tan solo reaccione en consecuencia a lo que venía tragándome por dentro, y que hoy terminó de explotar. 

Esa vez le mentí a Izan. Si había oído aquella discusión que tuvieron con Astor, y como él le reprocho "Es un insulto que pases de alguien como Vittorio, a alguien como Atlas Hyun".

Siempre he sido alguien seguro de mi mismo, pero oír aquello me dolió. Y eso que lo dijo una persona que no podría importarme en lo más mínimo lo que piensa. Pero es que me destroza creer que puede que Izan piense de ese mismo modo. En especial ahora que esta junto a su ex, y que de seguro eso trajo muchos recuerdos entre ambos.

¿Y si Izan se da cuenta de que lo sigue amando? ¿O si él se da cuenta de que cometió un error y quiere que vuelvan? Porque, ¿Cómo alguien podría dejar a Izan y no arrepentirse luego? Sobre todo al verlo. Esos ojos, su presencia, esa sonrisa de tonto que tiene, que a mi me fascina. 

Incluso a veces todavía me cuesta creer que me estoy follando a un hombre como Izan Marshall. 

Mis pensamientos son interrumpidos al ver a alguien pasar a mi lado y detenerse. Giro mi cabeza y lo veo parado a unos metros a mi derecha. Tiene su cabeza gacha y su mirada puesta en la pantalla de su celular, mientras se queja por lo bajo. 

El famoso Vittorio. Aquel que tuvo la capacidad de desquebrajar al gran Izan Marshall. 

Sería tan sencillo dispararle...

Y me odio por tener ese pensamiento. Pero es que me estruja el corazón al saber que hay alguien en la vida de Izan por la que me cambiaria si pudiera. Porque... ¿Cómo se olvida en unos meses, lo que vienes añorando durante cinco años? 

Le dije a Izan que lo esperaba en la cafetería de enfrente mientras era el funeral, pero me quede cerca por si él me necesitaba. Y ahí lo vi...

Los celos y la tristeza se apoderaron de mi cuando presencie aquella escena de los dos, y luego junto con sus hermanos. Los seis parecían compartir un vinculo tan fuerte, de lealtad, cariño y amistad. Se lo importante que son para él sus hermanos , y al ver como lo adoran a su ex, eso hizo que me sintiera angustiado. 

Levanta su cabeza, y sus ojos de un gris verdoso se posan en los míos con sorpresa. Quedo descolocado cuando me dedica una sonrisa amable. 

- Hola, Atlas, ¿verdad? - se acerca más a mi. Me extiende su mano. 

- Si. - respondo, aún algo conmocionado, estrechando su mano tenso. 

- Vittorio. - se presenta. 

Ja, como si no lo supiera, desgraciado. Se todo sobre ti, he oído tú nombre hasta el cansancio. ¿Qué es lo que tienes de especial?