¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Sunghoon fingió dormir al escuchar unos pasos por el pasillo que daba a la habitación, justamente donde dormía él. Se escucho el sonido de la puerta y segundos después, sintió el colchón hundirse atrás de él.
── Hoon, despierta.
Era Jake.
──...Alfa, tengo hambre ──susurró, moviendolo para que despierte── ¡Alfa!
── Ya me levante, amor ──susurró somnoliento, girandosé para ver a su Omega con el ceño fruncido── ¿Qué pasa?
── Tengo hambre, quiero que vayas a comprar.
── Amor... ──no evito quejarse, viendo la hora de aquella madrugada y suspirar── Son las cuatro de la madrugada. ¿Dónde crees que-
──Bien ──interrumpió Jake, saliendo de la cama y acercarse al armario ante la atenta mirada del pálido── No necesito tu ayuda.
─ ¿Bebé? ¿Qué vas hacer?
─ Iré yo solito. No te preocupas por tus bebés, eres un Alfa malo ──gruñó, poniéndose unos buzos y bufanda. Hacia frío en aquel entonces.
Sunghoon volcó los ojos, poniéndose de pie para detener al hamstersito bipolar, aquellos cambios por el embarazo traía muchas escenas diferentes de Park Jake.
Sí, desde hace un mes donde tenían aquella noticia. Sunghoon recordó el momento donde trabajaba unas horas extras en su empresa, hablando en una junta con varios empresarios. Y en ese entonces, había llegado su bebé eufórico gritando que sería papá.
"── ¡Serás Papá, Hoonsito!"
Habían festejado ese mismo día, incluso sus más cercanos socios y otros extranjeros se unieron al festejo. Felicitando a los esposos, Sunghoon recuerda llorar ese día y no dejaba que nadie tocara el abdomen de su Omega.
Sunghoon cuidó estrictamente al hámster, le prohibió hacer esfuerzo alguno, no existió la discusión y cualquier pesar en su trabajo, disminuyó. Fue tan tranquilo.
── Bebé, detente. Yo iré.
Jake forzajeo al sentir unos brazos envolverlo y besitos por todo su rostro, miró aún molesto al León.
── Yo quiero ir.
── Jake.
── Y no quiero un "no" como respuesta, tonto Alfa.
Sunghoon asintió, sin nada más que decir, fue alistarse, mientras que Jake tomó asiento en la cama y ronroneaba al acariciar su hinchado abdomen un poquito notorio.
