Sciocco: adj. [persona]
Que es ingenua y carece de malicia.
En términos generales, él era un idiota testarudo que no dejaba mostrar ningún atisbo de debilidad ante nadie. Un protector letal oculto en las sombras.
Ella era la otra idiota que logró p...
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CALLES DE NEW YORK CITY. 11:50 am
LOS CUATRO HERMANOS SE encontraban siendo escoltados por la policía al edificio Chrysler, uno de los rascacielos más conocidos de la ciudad. Iban en uno de los camiones de traslado de la jefatura. El plan era llegar hasta la nave desde allí. En las calles se podía apreciar a las masas confundidas y alteradas, el miedo comenzaba a dominar. La ciudad era un caos in crescendo y, así como la ciudad, la mente de Raphael también se volvía un despelote por culpa de cierta italiana de ricitos chocolate y su actitud tan desconcertante.
No entendía por qué estaba tan molesta y a la defensiva. Bueno, en parte se hacía una idea. Sinceramente se había comportado como un completo imbécil la última vez que se vieron. Además de eso, fue su culpa que terminara herida en el incidente de la estación de policía, así que si, claro que tenía razones suficientes para justificarse. Sin embargo, sabía que algo más había pasado, sus palabras tenían un sabor demasiado amargo y doloroso.
"¡A la mierda con eso! No me quedaré de brazos cruzados, así que deja de fingir que te importa".
Quiso gritarle que eso no era cierto y que le importaba más de lo que debería. Que no se perdonaría si algo le llegase a suceder, pero simplemente no le dio tiempo ni para abrir la boca. Gruño frustrado. No estaba contento con esa situación, más aún cuando ahora era completamente consciente de su sentir hacia ella. Porque si, ya no podía hacerse el ciego e ignorar que le gustaba, que su presencia era demasiado agradable para su gusto, que sus bromas no le molestaban tanto y que su risa desenfrenada no se le hacía escandalosa. Le costó aceptar que así era, pues en el fondo sabía que una chica como ella nunca podría fijarse en alguien como él, un brusco mutante con problemas de ira y mal genio. Roa era humana, solo eso era un rotundo jamás y nunca, pero allí estaba, siendo arrastrado por un sentimiento más fuerte que la razón.
Pensando en cómo había lidiado con todo ese asunto, llegó a la conclusión de que había sido muy cobarde de su parte tratarla como lo hizo y se sintió patético. ¿Tanto la había cagado? Por el momento, enmendaría sus errores una vez que toda esta locura acabara. Salvar la ciudad significaba ahora mucho más que solo eso para él. Tenía un nuevo motivo para pelear, eso estaba bastante claro.
—Tengo todo un equipo listo, informantes, tecnología, recursos —la jefa Vincent se apresuró a decir, dirigiéndose al espadachín frente a ella. —Todo lo que necesiten.
—No será necesario —habló Leo con seguridad. —Solo necesitamos que nos escolten hasta el edificio Chrysler sin ser vistos por los civiles. Nosotros nos encargaremos. Llegaremos hasta el Krang desde allí y destrozaremos su nave.
—Mientras tanto, April, Casey y Vern cerrarán el portal cuando les demos la señal —Donnie se disponía a codificar algunos datos mientras explicaba esto. —Neutralizar a Baxter Stockman será sencillo para ellos. Roa estará con un grupo de policías en cuanto-
