Miedo - Arthur Leclerc

27.

Julio 12, 2022
Mónaco

¡Eres Arthur Leclerc! -un grito nos hace girar para ver a una pareja de niños de unos once años con sus padres- ¿podemos tomarnos una foto?

Claro campeón -la sonrisa de Arthur crece cuando se agacha a su altura mientras yo apoyo mis manos en mi cintura dándoles espacio-

Y tú eres su novia -asiente feliz viéndome, río asintiendo-

¡No es solo su novia! -el grito de la niña nos hace girar a verla curiosa- ella es gimnasta, como yo

¿Eres gimnasta? -sonrío emocionada viéndola mientras ella asiente varias veces haciendo una medialuna-

¿Podemos hacerlo juntas? -dudo unos segundos viendo como me mira fijamente con una sonrisa en sus labios, nunca he practicado fuera de mi casa-

Heather estará encantada -asiente Arthur apoyando su mano en mi cintura mientras recibe mi bolso- tú puedes hacerlo

Asiento cuando susurra lo último en mi oído mientras la niña grita emocionada.

Contaré hasta tres -sonrío viéndola y ella asiente- uno, dos, tres

Los aplausos de sus padres suenan fuerte cuando ambas hacemos varias medialunas al mismo tiempo llegando al borde del muelle.

¡Gracias! -sus brazos rodeando mi cintura me sorprenden mientras correspondo su abrazo con fuerza-

Gracias a ti -susurró cuando me agacho para que nos tomen una foto juntas-

Algún día, yo también viajaré a otro país para poder ser una gimnasta como tú -sonrío sintiendo mis ojos llenarse de lágrimas-

Espero que Mónaco pronto tenga su propio equipo para que tú no tengas que alejarte de casa -sonríe volviendo a abrazarme antes de que me levante del piso- suerte, pequeña

La sonrisa de Arthur crece cuando vuelvo a entrelazar nuestras manos para seguir con nuestro camino a casa.

No tienes que esperar a que Mónaco decida tener su equipo -alzo mis cejas curiosa viéndolo cuando murmura eso- puedes proponerlo, ser su coach

¿Yo? -niego riendo mientras él tira de mi mano haciendo que lo mire-

Heather, esa niña te amo -suspiró viéndolo- puedes hacerlo, tienes el talento y podrías volver a vivir por la gimnasia

No puedo hacer rutinas -murmuro negando-

No tienes que, puedes hacer cortos ejercicios que formen una -asiente convencido- eres una medallista olímpica, sin duda puedes

Tal vez -susurró girándome para ver a la niña que aún ríe a lo lejos-

Julio 18, 2022
Mónaco

Suena tu teléfono -susurró la rubia que dormía junto a mí dándose vuelta para quedar boca abajo-

Definitivamente no es el mío -negué tomando su celular en mis manos para alcanzárselo-

¿Hola? -suspiré dejándome caer de nuevo en la cama mientras ella se sentaba en esta tomando la sabana para cubrirse- ¡por Dios, si!

Frunzo mi ceño curioso cuando asiente varias veces emocionada antes de colgar la llamada.

¿Quien era? -sonríe grande cuando pone su mirada sobre mí-

Quieren que sea jurado del U.S Classic -sonrió pero antes de que pueda decir algo ya está abrazándome emocionada, lo que me hace reír- viajare la próxima semana

Eso me obliga a darte tu regalo antes, entonces -asiento levantándome de la cama para tomar el sobre que tenía listo desde hace días-

¿Qué es? -sonríe cuando lo toma en sus manos, me encojo de hombros dándole a entender que lo abra- ¿un viaje a Portofino?

Tengo cosas importantes que preguntarte cuando estemos allá -murmuro haciendo que forme un pequeño puchero en sus labios-

No ayudas a mi curiosidad -susurra rozando sus labios con los míos- pero gracias por esto